Se acabó el cole y ahora toca ingeniárnoslas para mantener ocupadas esas cabecitas llenas de ideas que a veces pueden resultar un tanto peligrosas, sobre todo para nuestro corazón y los ataques que podemos sufrir cuando la casa se queda en silencio.
El otro día me encontré con esta interesante y refrescante propuesta veraniega para los más pequeños, bueno y no tan pequeños. Aquí tenéis este DIY: Dibujando con pintura congelada.
La idea es muy sencilla y se puede fabricar la pintura a partir de diferentes materiales que tengamos en casa en ese momento.
Consiste en llenar una cubiteras o moldes para polos con pintura de dedos, añadirle un palo para sujetarlos y luego congelarla. Sirve también sino tenemos pintura de dedos, cualquier otro tipo de pintura apta para niños que podamos diluir en agua, o colorante alimentício, eso si, este último sale peor de la piel y la idea es que no tengamos a los niños en modo multicolor todo el fin de semana.
Si tenemos la suerte de poder disfrutar de un jardín o zona exterior genial, pero si tenemos que hacerlo dentro de casa deberemos tomar ciertas precauciones ya que la pintura resultante una vez descongelada va a ser bastante líquida.
Bueno,, una vez hayamos congelado nuestra pintura los desmontaremos y dejaremos en un recipiente con más hielo para ayudar a que aguante fríos la mayor parte del tiempo. Y ya sólo tenemos que sacar unas cartulinas o folios para dejar que nuestros peques desplieguen su vena artística.
También podéis probar a pintaros el cuerpo y así, a la diversión de la propia pintura se le sumará la sensación del hielo recorriendo la piel, seguro que a los pequeños les encanta. Eso si, aunque sean aptas para niños es mejor vigilar que no los confundan con polos de sabores.
Vía | hands on as we grow En Bebés y Más | Pintura de dedos casera, ¿Sabes ya qué tipo de artista será tu hijo?