Si hace cosa de un mes, al explicaros que los bebés de seis meses pueden comer huevo, se generó cierto revuelo en Facebook porque "de toda la vida el huevo se da a los doce meses", hoy puede pasar algo similar con el pescado azul, porque hasta hace unos años se recomendaba a partir del año y medio, y resulta que no hace falta esperar tanto.
Desde hace unos años se dice que, viendo que no hay razón para esperar, los bebés pueden empezar a comer pescado azul a los seis meses de edad.
¿Desde hace unos años?
Así es: siete años para ser exactos, cuando se hizo una revisión de estudios que tenía como objetivo ver qué alimentos había que ofrecer primero a los bebés, con cuáles había que esperar y por qué, y los resultados mostraron que no había evidencia que demostrara nada concreto.
Es decir, al ver toda la evidencia disponible, se dieron cuenta de que la mayoría de recomendaciones que se daban no habían estado demostradas, de modo que ofrecer el pescado azul a los 18 meses no respondía a ningún criterio científico concreto. Así, sugirieron que podría empezar a ofrecerse a los seis meses, como la mayoría de alimentos.
Si a esto sumamos que cada vez más estudios están demostrando que el riesgo de alergia alimentaria no es mayor el empezar antes, sino menor (la exposición temprana parece reducir la probabilidad de que un niño desarrolle alergia a un determinado alimento), parece que la recomendación más lógica es la que hoy os estamos mencionando.
Pero el pescado blanco es más suave, ¿no?
Se dice que el pescado blanco (rape, lenguado, merluza...) es de más fácil aceptación al principio porque su sabor es más suave, y es cierto. Es un pescado más magro (de hecho, se le llama así: pescado magro), que el azul, que es más graso, y por eso tiene un sabor más fuerte.
Ahora bien, muchos bebés son amantes también de esos sabores, y no hay razón para evitarlo en este sentido, sobre todo si tenemos en cuenta que la grasa que aporta es muy saludable: son pescados ricos en ácidos grasos poli-insaturados, con especial mención al omega 3, cuyos beneficios son de sobra conocidos.
¿Cuánto pueden comer?
Según las últimas recomendaciones, que podéis leer en la última guía de alimentación complementaria de la Generalitat de Catalunya, el pescado se ofrece a partir de los 6 meses, dando unos 30 a 40 gramos al día, preferiblemente fresco y sin espinas.
En este cuadro podéis ver cuándo se ofrece cada alimento:
Si no le gusta mucho, podemos dejarlo unos días hasta volver a ofrecerlo, e ir repitiendo las exposiciones a los alimentos de tanto en cuanto. La razón de hacerlo así, incluso si sigue haciéndonos saber que no le acaba de emocionar su sabor, es que se ha visto que hacen falta varias exposiciones a un alimento para que acabe gustando, o para apartarlo definitivamente.
Si bien hace unos años se hablaba de 12 a 15 exposiciones en días separados, cada vez más se habla de que se han visto casos de éxito tras más de 25 exposiciones. Es decir, niños que no aceptan el sabor de un determinado alimento hasta que lo han probado más de 25 veces, para entonces comerlo como si fuera un alimento más.
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