El desayuno es una de las comidas más importantes del día, ya que aporta la energía y los nutrientes que el organismo necesita para empezar bien el día que queda por delante.
Desayunar bien y equilibrado cada día les permitirá afrontar las actividades físicas e intelectuales diarias con más vitalidad y alegría. Por este motivo, el hacer del desayuno un hábito familiar, ayudará a estimular su consumo. Y debemos practicar con el ejemplo mientras explicamos a los más pequeños de la casa de su importancia.
Además, deberíamos procurar que el desayuno sea una comida nutritiva compuesta por hidratos de carbono como las galletas o el pan, lácteos, fruta y agua o cualquier fuente de hidratación. Dentro de estos cuatro grupos de alimento, podemos dejarles que elijan lo que más les gusta.
En lo relacionado con los lácteos pueden elegir entre un yogurt, un vaso de leche sola o chocolateada o un poquito de queso fresco.
Con respecto a los hidratos de carbono y la fibra podrán optar entre tostadas, cereales solos o con frutas, bizcochitos o galletas, así como también son muy importantes los productos de cereales completos, bien sea pan u otros productos que los contengan.
Existen recetas que ofrecen diferentes alternativas para el desayuno, todas equilibradas.
Desayunos equilibrados
A) Un yogurt , 1 tostadas con queso fresco y 1 mandarinas B) Un vaso de leche, 1 rebanada de pan con aceite de oliva, una loncha de jamón serrano y 1 naranja C) Un vaso de leche con cacao, 3 galletas, y 1 plátano D) Un yogurt, un bizcochito relleno de chocolate y un vaso de zumo de naranja, pomelo, melocotón o manzana (se puede ir variando) E) Un yogurt con frutas (manzana, plátano, melocotón, frambuesas, fresas, etc.) y dos tortitas con mermelada o un Osito LULU.
Como veis, las posibilidades son muchas. No hace falta desayunar siempre lo mismo. Se puede variar para no aburrirlos, y hacer del desayuno una sorpresa agradable para empezar el día con alegría.
Desayunar es un hábito muy saludable que debemos inculcar a nuestros hijos desde que son muy pequeños. Desayunando bien sabemos que muchas de sus necesidades se verán satisfechas. Lo cual proporciona mucha tranquilidad cuando se quedan a comer en el colegio, así como permitirles tener un estilo de vida equilibrado, pudiendo afrontar todas las actividades y disfrutar de todos sus momentos del día con alegría, con vitalidad.
También es importante que tengamos en cuenta que el desayuno y la comida no son la cena, y que los niños deben recibir un snack equilibrado al llegar a casa. Por ejemplo, una pieza de fruta y un delicioso bizcochito. Si estos, además, tienen el sabor y la forma del Osito LULU ¡seguro que les encanta!
Fotos | Kevin Krejci, Karina Oliveira