Bunmi Laditan, madre y autora del libro 'The Honest Toddler' ha lanzado una bomba en Facebook sobre un asunto que preocupa mucho a algunos padres últimamente: los deberes abusivos.
La madre ha compartido la carta que ha enviado a los profesores de su hija diciéndoles que no hará más deberes en casa. Sin duda, algo que muchos padres desearían hacer, o lo piensan pero no acaban de dar el paso. ¿Tú harías algo así?
La carta dice:
"Maya reducirá drásticamente la cantidad de deberes que hace este año. Ella ha estado muy estresada y está comenzando a tener síntomas físicos como dolor en el pecho y levantarse a las 4AM preocupada por la carga de trabajo escolar.
No está atrasada académicamente y disfruta mucho de la escuela. Hemos consultado con un tutor y un terapeuta sugirió aligerar la carga de trabajo. Haciendo 2-3 horas de deberes tras llegar a casa a las 4:30 le deja muy poco tiempo simplemente para ser una niña o disfrutar tiempo con su familia y nosotros queremos evitar que se hunda en una depresión por esto. Gracias por entenderlo".
Acompaña la carta un texto extendiéndose sobre el tema. Se hace una pregunta que yo también me hago cada día:
"Ella está en la escuela cada día desde las 8:15 am hasta las 4 pm, que alguien me explique ¿por qué debe tener 2-3 horas de tarea para hacer todas los días?.
Hace la tarea hasta las 6.30, luego la cena, luego una hora para relajarse (o terminar los deberes) antes de irse a la cama. ¿Tiene algún sentido? ¿No es importante el tiempo en familia? ¿No es importante tener tiempo para relajarse en casa? ¿O debería convertirse en una alcohólica al trabajo de 10 años?"
No puedo estar más de acuerdo. Si tras permanecer en el colegio durante 6-7 u 8 horas un niño todavía tiene que hacer tareas en casa, es una clara señal de que algo está fallando. Evidentemente, los profesores, el colegio o el sistema educativo tienen un grave problema si la jornada escolar no les alcanza para dar los contenidos que tienen que dar. Pero esos fallos no tienen por qué pagarlos los niños.
Los niños tienen derecho al juego, al tiempo libre, a pasar tiempo con su familia sin sentir constantemente el agobio de los deberes. Mi hija duerme fatal cuando tiene un exámen al día siguiente o no ha llegado a acabar los deberes ese día.
Hay otro tipo de "deberes" que los niños deberían hacer como visitar museos, investigar sobre un tema que les apasione, leer libros, ver películas, jugar al aire libre, practicar deporte... En fin, un montón de cosas que los niños están dejando de hacer por culpa de la sobrecarga de deberes diarios.
Los padres tenemos derecho a decidir lo que hacen nuestros hijos en casa
En su post acaba diciendo:
"Supongo que sabré algo de su escuela mañana. Tenemos algunas decisiones que tomar. Pero esto es un hogar libre de deberes y no me importa quién lo sepa. Mi hija tiene que ser una niña".
Me siento tan identificada con esta madre. Mi hija mayor sufre igual por los deberes (en casa ya hemos tomado medidas, ya os contaré más a fondo). Dos o tres horas diarias de deberes más fines de semana hipotecados por los estudios. ¡Dijimos basta!
Yo creo que los padres tenemos que animarnos a dar el paso cuando vemos que nuestros hijos lo están pasando mal. Es más, es nuestro deber hacerlo. Por ellos.
No es una rebeldía ni tampoco se trata de desacreditar o atacar a los profesores. Es nuestro derecho (y nuestro deber) decidir lo que hacen nuestros hijos en casa. El horario escolar no es nuestro terreno, no opinamos sobre cómo se organizan los horarios en el colegio, pero el tiempo que los niños están en casa, lo que se hace es decisión de los padres y de los hijos.
Vía | Babble
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