Todos, adultos y niños, deberíamos conocer primeros auxilios y saber cómo actuar en situaciones de emergencia, pues en cualquier momento podríamos necesitarlo para salvar la vida de otra persona. Sin embargo, y a pesar de que se trata de un contenido regulado por ley que todos los alumnos deberían conocer, la asignatura de Primeros Auxilios en los colegios sigue siendo una tarea pendiente.
Por lo general, los niños que saben cómo actuar ante determinadas situaciones han adquirido estos conocimientos gracias a la educación de sus padres, o a las charlas divulgativas que en momentos puntuales ofrecen algunos colegios, pero ¿es suficiente con esto?
Los primeros auxilios forman parte del currículo básico de Educación Primaria
Según el Real Decreto 126/2014, de 28 de febrero, por el que se establece el currículo básico que deben tener los alumnos de Educación Primaria, los primeros auxilios deberían formar parte de los contenidos que se enseñan a los niños en la asignatura de Ciencias Naturales.
- En concreto, en los contenidos curriculares del apartado relacionado con el estudio del ser humano y la salud, podemos leer lo siguiente: "conocimiento de actuaciones básicas de primeros auxilios".
- Y en el apartado de 'Estándares de aprendizaje y evaluables' se indica que el alumno debe "conocer y utilizas técnicas de primeros auxilios, en situaciones simuladas y reales"
De un tiempo a esta parte tengo la sensación de que cada vez más colegios se comprometen con la enseñanza de los primeros auxilios. Quizá no de la manera habitual y curricular de la que hablamos, pero sí al menos mediante la oferta de cursos, talleres o charlas en donde se explica a los niños cómo llamar al teléfono 112, qué hacer en caso de emergencia o incluso cómo practicar maniobras de RCP.
Por otro lado, también se están comenzando a instalar desfibriladores en los centros educativos, pues en algunas comunidades autónomas es obligatorio que ciertos espacios fuera del ámbito sanitario (incluidos los colegios) cuenten con estas máquinas que pueden llegar a salvar la vida de una persona en un momento dado.
Pero aunque todos los pasos orientados a la información y formación de los alumnos en este área sean bienvenidos, los expertos continúan alertando de que la enseñanza de primeros auxilios en los colegios sigue siendo muy insuficiente:
"En otros países la enseñanza de técnicas de primeros auxilios y maniobras de RCP alcanza a más del 60% de la población; hay quien da cifras de hasta el 90%. España aún no alcanza el 10% de población capacitada para realizar una correcta RCP" - podemos leer en el blog "Cuentos para aprender a salvar vidas", puesto en marcha por la iniciativa "RCP desde mi cole", de la que ya os hablamos hace algún tiempo.
¿Por qué los niños deberían saber primeros auxilios?
La lista de motivos por las que los niños (y por supuesto, los adultos) deben conocer cómo actuar en caso de emergencia es larga, aunque debería ser suficiente con decir que conocer primeros auxilios puede ayudar a salvar una vida.
Además, los niños son especialmente receptivos a la adquisición de nuevos conocimientos, especialmente si estos se imparten de manera divertida, por lo que es sumamente importante que este tipo de información capte su atención desde el inicio, y les llegue de manera clara y precisa.
Conocer primeros auxilios ayudará a los niños a:
Poner en práctica el PAS (proteger, avisar, socorrer), pues ante una situación de emergencia es fácil bloquearse o asustarse y, en consecuencia, actuar de forma incorrecta.
Saber cómo reaccionar ante atragantamientos, heridas, quemaduras, síncopes...o cualquier otra situación de emergencia que puede presentarse en cualquier momento y lugar.
Algunos expertos ven necesario que los niños aprendan técnicas de reanimación y primeros auxilios para saber cómo actuar en caso necesario con las personas que cada día están con ellos, tanto en su propio centro escolar (por ejemplo, un profesor que sufre un ataque al corazón, un compañero que se atraganta...), como en sus hogares (por ejemplo, un padre o una madre que sufre un desvanecimiento, un hermano que se golpea la cabeza en una caída...)
Conocer cómo funciona el número 112, su importancia y tenerlo siempre presente.
En caso de parada cardiorespiratoria, estarán capacitados para iniciar las maniobras adecuadas hasta que lleguen los servicios de emergencia.
Por eso creo que, al margen del papel que jueguen los colegios en este tema, los padres deberíamos ser muy conscientes de esta importante realidad y enseñar a nuestros hijos desde muy pequeños a identificar situaciones de peligro, y saber dónde llamar para ponerlo en conocimiento de los servicios de emergencia. A medida que vayan creciendo podemos darles más indicaciones para actuar ante otro tipo de emergencias.
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