Congelar los óvulos: todo lo que tienes que saber si te planteas preservar tu fertilidad
La criopreservación de óvulos es una técnica mediante la cual se congelan y conservan los ovocitos en nitrógeno líquido a -196º, sin que esto provoque alteraciones significativas de cara a poder utilizarse con éxito en un futuro.
Te contamos en qué casos se lleva a cabo, y todo lo que deberías saber sobre el proceso si te planteas preservar tu fertilidad mediante esta técnica.
¿Qué es la criopreservación de óvulos?
La criopreservación de óvulos (también llamada vitrificación o crioconservación) es una técnica que vitrifica a -196º los óvulos, de manera que se mantiene su calidad sin sufrir alteraciones significativas.
¿A qué edad puedo congelar mis óvulos?
Según los expertos, la edad más idónea para realizar la vitrificación de óvulos es en la veintena, ya que a partir de los 27 años la fertilidad comienza a descender. En cualquier caso, no es hasta los 35 años aproximadamente, cuándo la reserva ovárica empeora considerablemente.
Preservar los óvulos a edades tempranas aumenta las posibilidades de conseguir el embarazo en el futuro y de dar a luz un bebé sano libre de enfermedades cromosómicas ligadas a la edad materna.
¿En qué casos se recurre a la congelación de óvulos?
La criopreservación de óvulos es un tratamiento apto para cualquier mujer cuyo ritmo de vida u otras circunstancias personales no le permita ser madre joven, pero no quiera renunciar a su sueño.
Las razones más habituales en las que las mujeres suelen recurrir a la vitrificación de óvulos para postergar su maternidad en las mejores condiciones son:
Preservación por motivos médicos
Mujeres diagnosticadas de endometriosis, enfermedades autoinmunes, enfermedades del colágeno o con antecedentes familiares de menopausia precoz.
Mujeres en edad fértil diagnosticadas de cáncer, que deben someterse a tratamientos agresivos que puedan hacer peligrar su reserva ovárica. Con la criopreservación podrían ser madres una vez superada la enfermedad.
Preservación por motivos sociales
Cuando la mujer considera que existen unas determinadas circunstancias en su vida actual (trabajo, circunstancias personales, estilo de vida...) incompatibles con la maternidad en ese momento. Congelar sus óvulos le permitiría posponer la maternidad con garantías.
Según datos de clínicas especializadas, la preservación de óvulos por motivos sociales se ha incrementado en nuestro país en un 261% en los últimos cinco años, siendo la carrera laboral la principal circunstancia.
Preservación como parte de un tratamiento de fertilidad
¿Cómo se realiza el proceso?
La técnica de vitrificación de óvulos consta de dos procesos:
- El primero paso es la obtención de ovocitos, que consiste en estimular los ovarios mediante medicación de forma que se desarrollen múltiples folículos, y luego realizar una punción ovárica o folicular para extraer los óvulos. La extracción se realiza en quirófano y bajo sedación, y tiene una duración aproximada de entre 20-40 minutos.
Antes de iniciar este primer paso es necesario conocer la reserva ovárica de la mujer a través de una analítica hormonal.
- El segundo paso del proceso es la crioconservación de dichos óvulos, que debe realizarse en un estadio de maduración en metafase 2, y a velocidades ultrarrápidas, sumergiéndolo en nitrógeno líquido a -196 grados.
Cuando la mujer decide ser madre se descongela el óvulo y se procede a la fertilización in vitro, utilizando el semen de la pareja o semen de donante. Para ello, debe prepararse el endometrio, que es la parte del útero que debe acoger a los embriones, y proceder a la transferencia del óvulo fecundado en el útero materno.
¿Cuánto tiempo duran los óvulos congelados?
Los expertos explican que siempre y cuando los óvulos se crioconserven en las correctas condiciones y no sufran ninguna alteración, no existe un tiempo concreto a partir del cual dejan de ser viables.
¿Cuánto cuesta congelar los óvulos?
Según podemos leer en la web Reproducción Asistida, el precio de la criopreservación de óvulos suele situarse en una horquilla de entre 2.500 a 4.000 euros, aunque siempre dependerá de la clínica elegida.
Pero además, hay que añadir los siguientes costes adicionales:
Medicación hormonal para la obtención de óvulos (aproximadamente, 1.000 euros).
El coste de mantenimiento anual de los óvulos congelados, pues no siempre está incluido en el precio inicial que dan las clínicas.
El coste del tratamiento de fertilidad (FIV o ICSI) que vayan a realizarse una vez la mujer decida descongelar sus óvulos.
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