Paso de la cuna a la cama: cómo debe ser la cama de los niños y qué tener en cuenta para elegirla

Tanto si el bebé duerme en su cuna como si practicáis el colecho, llegará un momento en el que el niño empiece a dormir en su propia cama. Esta transición supone un importante hito en la vida del niño, por lo que es importante saber cómo hacerlo para que sea agradable para todos.

Entre los muchos aspectos que debemos cuidar está el confort y la seguridad del niño, y para ello es fundamental escoger una cama acorde a sus necesidades.

Hemos elaborado una guía de compra con diferentes modelos de camas para niños, así como aspectos que debemos tener en cuenta tanto a la hora de elegirla, como de acondicionar su habitación.

Cama individual de diseño clásico

Las camas individuales de diseño clásico están compuestas por un somier, cabecero y piecero. Existen diversas medidas, siendo las más habituales de entre 80 y 90 cm de ancho x 190 cm de largo.

La principal ventaja de este tipo de camas es que podemos adaptarlas con gran versatilidad a cualquier espacio, así como variar su aspecto con la periodicidad que deseemos, simplemente eligiendo nueva ropa de cama o fundas de edredones estándar, de venta en cualquier superficie.

Igualmente, sus medidas y diseño clásico nos permitirán alargar su uso tantos años como queramos, adaptándose fácilmente a los gustos del niño y adolescente.

Os compartimos algunas propuestas:

Camas extensibles o evolutivas

Las camas pequeñas y extensibles son ideales para los niños de tres a seis años, pues su reducido tamaño se adecua mejor al niño, resultando  cómodas y prácticas para ellos. Además, al ser evolutivas se convierten en una gran opción si quieres que la habitación le dure algunos años.

Aquí os dejamos algunos ejemplos:

Cama individual de diseño original

Una de las tendencias que está arrasando en decoración infantil son las camas con diseño en forma de casa. Resultan muy coquetas y acogedoras, y a los peques les encanta.

Otras tendencias divertidas y muy atractivas para los más pequeños son las camas decoradas con motivos de fantasía, coches, unicornios, superhéroes, camas en alto... En el mercado hay una amplísima variedad para todo tipo de gustos.

Sin duda este tipo de diseños resultan muy originales y aportan un toque divertido a la habitación, pero es recomendable reflexionar bien su compra, ya que suelen suponer un desembolso económico mayor que las camas tradicionales.

Estos son algunos de los modelos originales de cama que más nos han gustado:

Camas Montessori

Cada vez son más las familias interesadas en fomentar la autonomía y desarrollo del niño a través del método Montessori. En este sentido, las camas de estilo Montessori se convierten en un artículo imprescindible en el momento en el que niño está preparado para dejar la cuna.

Este tipo de camas aportan grandes beneficios para los más pequeños, siendo especialmente notables los aspectos relacionados con su seguridad e independencia.

Si quieres optar por una cama Montessori para tu hijo, te compartimos algunas bonitas propuestas:

Camas para compartir habitación

Si has decidido que tus hijos compartan habitación, es recomendable tener en cuenta varios aspectos, como las necesidades particulares de cada niño, la comodidad y el espacio de la habitación a la hora de colocar las camas.

En este sentido, existen varias opciones que podemos considerar en función de la estructura y amplitud de la habitación:

Literas

Las literas es una de las primeras opciones que se nos viene a la cabeza cuando pensamos en acondicionar la habitación para dos hermanos. Sin embargo, es importante tener en cuenta una serie de aspectos relacionados con la seguridad, así como la edad de los niños que van a hacer uso de ellas.

También hay otro aspecto importante que debemos considerar, y es que la litera no es la mejor opción para fomentar la autonomía de los más pequeños, ni a la hora de enseñarles a hacer la cama (por la dificultad añadida que entraña su diseño), ni a la hora de subir y bajar por sí mismos.

Si a pesar de ello, consideras que las literas son la mejor opción para el cuarto de tus hijos, te compartimos algunos modelos que nos han encantado:

Cama nido

La cama nido es una cama extraíble que se guarda debajo de otra. Es una opción muy práctica para quienes buscan ahorrar espacio sin recurrir a las literas.

Hay camas nido que tienen patas plegables que debemos extender antes de utilizarla. De este modo, ambas camas (superior e inferior) quedarían al mismo nivel.

También existe otra modalidad de cama nido con ruedas, que se esconde fácilmente bajo la otra cama con tan solo empujarla, fomentando de este modo la autonomía de los niños. Este modelo es mucho más cómodo de utilizar en el día a día, sin embargo, el niño que duerma en la cama nido estará a un nivel más bajo que el que duerma en la cama superior.

Os compartimos algunos modelos que nos han gustado:

Camas tren y en L

A diferencia de las literas, las camas tren solo se solapan parcialmente. Lo más habitual son las camas tren colocadas una sobre otra, pero también es posible encontrar camas en forma de L o en línea, compartiendo el mismo cabecero.

He aquí algunos ejemplos:

Camas abatibles

Las camas abatibles se "esconden" dentro de un mueble, desapareciendo por completo de la vista cuando se recogen. Son de gran ayuda en el caso de habitaciones pequeñas, pues permiten maximizar el espacio del cuarto y ser utilizado para otros usos.

Pero es fundamental elegir una cama abatible que garantice el correcto descanso del niño, evitando caer en somieres y colchones de mala calidad.

Os compartimos algunos ejemplos de camas abatibles:

Almohada, colchón y otros aspectos a tener en cuenta

Una de las primeras cosas que debemos tener en cuenta antes de montar la habitación de nuestro peque es la ubicación de la cama. Para evitar riesgos, es importante que esté alejada de las ventanas, así como de cordones de cortina o persianas. Tampoco se recomienda instalar repisas, estantes o marcos encima de la cama, pues podrían golpearse por accidente o caerles encima.

Salvo que venga incorporada, si hemos optado por una cama de altura estándar se recomienda colocar una barrera de seguridad para evitar caídas, especialmente si el niño todavía es pequeño.

En cuanto al colchón de la cama, es recomendable elegir uno de firmeza medio-alto, que reparta el peso de manera uniforme por toda la superficie, sea hipoalergénico y tenga un alto nivel de transpirabilidad.

En lo que respecta a la almohada -si ha llegado el momento de comenzar a utilizarla- debemos elegir una almohada baja que garantice que la cabeza, cuello y espalda quedan alineados en la misma posición, para evitar problemas cervicales.

Otras recomendaciones que te pueden interesar:

• Almohada Pikolin Petit Plus para niños. A la hora de elegir la almohada perfecta para un niño debemos procurar que sea una almohada de baja firmeza, como esta, especialmente diseñada para niños de 2 a 6 años. Posee un tratamiento higiénico contra ácaros, bacterias y hongos, un núcleo de fibra hueca cardada siliconada, funda exterior 100% de algodón listado y jaquard, y funda interior 100% algodón. Además es totalmente lavable.

• Amazon te ofrece la posibilidad de crear una lista de nacimiento con los artículos que elijas para tu bebé. Funciona como una lista de bodas, pero para otro momento de tu vida. Para crearla, Amazon te sugiere listas recomendadas, o bien puedes elaborar tu propia lista configurándola con los productos que más te interesan para tu bebé. También puedes compartirla con familiares, amigos y conocidos para que conozcan tus deseos.

Nota: la elección de los productos mencionados en el artículo es una decisión del equipo editorial. Algunos de los enlaces pertenecen a programas de afiliación. Es posible que haya cambios en el precio y la disponibilidad a partir de la fecha de publicación original.

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