La muñeca Barbie lleva ya muchos años entre nosotros y ya nos hemos acostumbrado a su figura alargada y delgada, tanto que nos parece normal que sea así. De hecho, nos hemos acostumbrado incluso a otras muñecas con una estética más agresiva como las Monster High, que prácticamente todas las niñas tienen o desean, y cuya vestimenta y estética, llamadme antiguo, parece sacada de un grupo de prostitutas celebrando la noche de Halloween.
Con todo esto quiero decir que ni la Barbie es normal, ni lo son las Bratz, ni tampoco las Monster High, que representan una manera de ser mujer muy irreal, convirtiéndose en un modelo para las niñas que muy pocas llegarán nunca a alcanzar y que, de hecho, ni siquiera deberían tratar de lograr.
Con el fin de mostrar al mundo cómo sería la Barbie si tuviera las medidas de una chica de 19 años normal, el artista Nickolay Lamm ha creado una muñeca alternativa a la de toda la vida, gracias a la cual podemos ver cuán desmesuradas son las proporciones de la Barbie real.
Lamm cogió las medidas de una chica estadounidense promedio sana de 19 años y las trasladó a una muñeca con las mismas facciones que Barbie para compararlas. El resultado es el que veis en las fotos: la nueva Barbie no es tan alta, no está tan delgada y, entre otras cosas, tiene los pies un poco más grandes.
Hay gente que pensará que es absurdo, que sólo es un juguete, sin embargo se sabe que para las niñas es algo más que una simple muñeca con la que jugar. En un estudio realizado con niñas de 6 a 10 años se vio que las niñas que juegan con muñecas delgadas tienden a comer menos que las que juegan con muñecas de talla media.
En otro estudio llevado a cabo con niñas de 5 a 8 años vieron que las que jugaban con Barbie tenían un peor concepto sobre su propio cuerpo y un mayor deseo de estar delgadas que las que jugaban con muñecas menos delgadas o con las que no jugaban con muñecas. En las niñas más mayores ese efecto no se produjo, sirviendo como aviso para que las niñas menores de 8 años jueguen con muñecas con talla normal.
Lamm ha comentado que su intención era mostrar que una muñeca con las medidas de una persona media puede ser también bonita, que puede representar también la belleza, y estoy de acuerdo con él y seguro que las niñas pensarán lo mismo. ¿Por qué no hacer entonces las muñecas con un aspecto más normal? A saber, quizás Mattel sea, de manera consciente, el primero de los cientos de inputs que una niña y luego mujer recibirá a lo largo de su vida para sentirse insatisfecha consigo misma.
Vía | Papás e hijos 2.0 Más información | Nickolay Lamm En Bebés y más | ¿Induce la Barbie a problemas alimentarios?, La tele que no educa: 'Barbie Life in the Dreamhouse', "Las niñas van asumiendo con naturalidad perversa su condición de objetos sexuales". Entrevista a la psicóloga Olga Carmona