Ian Uriel nació a las 28 semanas de gestación con un peso de solo kilo y ochenta gramos, después de que a su madre le detectaron preeclampsia y tuvieran que realizarla una cesárea, cuatro días después de ingresarla. El recién nacido permaneció 84 días hospitalizado en la UVI neonatal del Hospital de Ginecología y Obstetricia 'Dr. Luis Castelazo Ayala'. Gracias al Banco de Leche Materna del Instituto Mexicano de Salud Social (IMSS) se pudo recuperar antes, al ser alimentado con la mejor medicina existente.
Por eso, cuando Ian fue dado de alta, su mamá decidió donar 30 litros de leche materna que quedaron como reserva para otros prematuros que lo necesitan, igual que su hijo.
11 bebés beneficiados
“La importancia de la lactancia materna radica en que les das muchos anticuerpos a los bebés, los ayudas a ganar peso más rápido, en su crecimiento y también es un plus el apego que tienes con tu hijo. Yo invitaría a las mamás para que realmente les brinden este beneficio”.
Es la petición de Celeste, que reconoce que reconoce que además del esfuerzo del personal del Seguro Social, fue de gran ayuda la leche materna a su bebé para que poco a poco ganara peso y fortaleciera su sistema inmunológico.
Y es que Celeste recibió el alta a las dos semanas del parto, pero su bebé permaneció cerca de tres meses, varias semanas en el UVI lejos de su mamá. En su recuperación fue fundamental ser alimentado a diario con leche materna.
Ian llegó a bajar a 850 gramos los días posteriores a su nacimiento. Celeste reconoce en un medio local:
“Fueron días muy difíciles. No es fácil estar en terapia intensiva en una montaña rusa de emociones y sentimientos. Hay días muy buenos en los que tu bebé tiene grandes avances y hay días muy malos. Pero lo que te impulsa es que él tan chiquito le está echando ganas”.
Una razón más para donar leche materna y ayudar a otros prematuros, como hizo Celeste.
La jefa del Departamento de Nutrición y responsable del Banco de Leche Materna de esta Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE), Minerva Lara Fuentes, explica que "las principales funciones de este servicio es promover, recolectar, conservar y llevar a cabo controles de calidad de la leche materna".
“Este Banco de Leche se creó para aquellas mujeres que están hospitalizadas o mujeres puérperas que sus bebés quedaron internados aquí en el hospital, la finalidad es brindarles este alimento idóneo a sus bebés prematuros o de término".
Una necesidad que continúa a pesar de la Covid-19. En estos momentos, cada Banco de Leche se ha readaptado para evitar contagios y poder mantener la distancia sanitaria de seguridad. Por ejemplo, este centro hospitalario de Ciudad de México explica que la habitación solo es utilizada por cada madre la primera vez y con cita, para orientarla y explicarla cómo debe traer leche materna de su domicilio.
Además, se ha acondicionado un consultorio para la entrega de leche materna y solamente se permite que entre a dejarla el padre o la madre ya cada donante se le practican análisis para comprobar que está sana.
La importancia de la leche materna para los prematuros
La leche materna ha demostrado múltiples beneficios en el bebé prematuro, puesto que constituye un verdadero medicamento natural que ayuda a mejorar la estructura del corazón y a reducir la incidencia y la gravedad de algunas enfermedades típicas de la prematuridad, como la enterocolitis necrosante (en un 80%), una enfermedad que afecta al intestino y el colon y que puede requerir cirugía.
La leche materna para el prematuro es un tratamiento de salud que la madre puede proporcionarle, preferiblemente de forma directa a través de la succión del pecho o bien con leche extraída. Así lo defiende la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria. producción y la succión, o practicando el método canguro incluso si la alimentación va a ser con leche extraída.
La leche materna se adapta a las necesidades del bebé, hasta tal punto que se ha confirmado que la leche que produce la madre de un bebé prematuro es diferente en algunos aspectos a la leche de otra mujer.
Además, la capacidad de absorción de los ácidos grasos de cadena larga de la leche materna es de un 90% o más, mientras los de la leche artificial es solamente del 65%, lo que supone una enorme ventaja para el desarrollo de su sistema nervioso, su cerebro y su retina. Y no solo eso, la leche de la madre de un niño prematuro cobtiene más defensas para luchar contra las infecciones.
Por eso, teniendo en cuenta que la leche materna para los prematuros es un tratamiento de salud prioritario, hay que ser tan generosos como Celeste y donar para otros bebés que puedan necesitarlo, ya que la reserva se ofrece primero a los prematuros con peso bajo y, si viene de una madre de uno de ellos mejor porque, como hemos explicado, las propiedades de su leche son diferentes.
Vía | Instituto Mexicano del Seguro Social
Fotos | iStock
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