Las madres a veces tienen problemas con la lactancia materna, y el reino animal no es la excepción. Es lo que le sucedió a una mamá orangután del zoológico Metropolitano de Richmond (Virginia, Estados Unidos), que dio a luz a su bebé en diciembre del 2022.
Zoe, la orangutana de 14 años, se había quedado huérfana a los nueve meses y nunca había visto a otra madre orangután criar a un bebé. También tuvo problemas para amamantar y criar a su primer bebé, Taavi, cuando nació hace dos años, y los cuidadores del zoo acabaron alimentándolo con biberones.
Pero esta vez fue diferente gracias a la genial idea de un veterinario. Se le ocurrió pedirle a Whitlee Turner, una cuidadora del zoo que acaba de ser madre, que le diera el pecho a su bebé frente a Zoe, para que así la orangutana pudiera aprender por imitación y empatía. Ella no lo dudó y aceptó enseguida.
El vídeo viral de la cuidadora y la orangutana
Ella misma había tenido al comienzo dificultades para amamantar a su bebé y recibió la ayuda de médicos y especialistas para salir adelante. Así que, ahora tocaba ayudar a otra madre.
La cuidadora llevó a su hijo Caleb, que entonces tenía cuatro meses, al recinto de Zoe poco después de que la mamá orangután diera a luz. Sentada sobre una manta doblada, con su bebé en brazos, se levantó el sujetador de lactancia y dejó que él buscara el pezón y se enganchara.
“Le mostré todo a Zoe, sin modestia”, dijo Turner. “Quería que ella pudiera ver todo el proceso, porque los orangutanes no usan camisas. Quería que ella pudiera ver mis pechos, ver a Caleb y poder verlo hurgando y buscando el pezón”.
"Con el sostén bajado, exageré mucho cuando lo puse para que [Zoe] viera que el bebé va aquí. Todo el tiempo estuve hablando con ella y señalándola, señalando al bebé, señalando sus pechos. Y cuando Caleb estaba enganchado, se lo estaba mostrando, asegurándome de que viera la parte importante.
Todo el tiempo se quedó mirándome con curiosidad. No amamantó a su bebé de inmediato, pero definitivamente estuvo observando todo el tiempo”.
La cuidadora principal del zoológico, Jessica Gring, también colaboró con la causa. Usó un animal de peluche colgado alrededor de su cuello, de forma similar a como un orangután bebé se aferraría a su madre.
La cuidadora y madre reciente que ayudó a la orangutana ha dicho que ha sido una experiencia muy especial poder ayudarla:
“Pasé un momento muy difícil al principio como nueva mamá con mi viaje de lactancia. [Yo] necesité mucha orientación y ayuda antes de que realmente lo resolviéramos. Creo que fue realmente especial poder compartir esto con [Zoe] y ayudarla en su viaje. Ya sea un orangután o un ser humano, solo quiero poder ayudar a cualquier nueva mamá”.
El orangután es una especie nativa de Borneo y Sumatra en peligro crítico de extinción. Es el segundo primate más grande después del gorila y su gestación es de ocho meses y medio, un periodo similar a la gestación humana.
“Orangután” significa “Hombre del bosque” en malayo. Se clasifican como simios, no monos, y se encuentran entre los animales más inteligentes del reino animal. Esta historia de la orangutana del zoológico de Richmond y su bebé, cuyo nombre será anunciado próximamente, lo corrobora.