Según la investigación, para que la leche materna mantenga sus propiedades antioxidantes, encargadas de reforzar las defensas del bebé, debe congelarse a menos 80º.
Pero las neveras que todos tenemos en casa permiten una congelación mínima de menos 20º.
A partir de los 20 días siguientes a su congelación a menos 20º, se produce una disminución de la actividad de la enzima antioxidativa que hace que la leche pierda calidad. Congelada a menos 80º, esto recién sucede pasados más de 45 días.
Vía | Yahoo News En Bebés y más | Más bancos de leche materna para España