Un número considerable de heridos en el terremoto de Haití, entre los que se encuentran muchos niños, han sido trasladados a diferentes hospitales en el vecino Santo Domingo. Entre ellos hay bebés amamantados que están separados de sus madres o han quedado huérfanos. A ellos se ha acercado la joven Sonia Marmolejos, una mamá dominicana que amamanta a su bebé de dos meses, y esta dando el pecho a los niños de Haití para alimentarlos y reconfortarlos.
Uno de ellos se llama Orlando Diego. Los medios cuentan que el pequeño lloraba de hambre y de deshidratación, y que Sonia, poco antes de una intervencíón en la que corregirían una hendidura en su cráneo, lo amamantó.
El papá no entendía lo que le ofrecía la joven Sonia pero otra persona hizo de intérprete y el padre accedió. El niño es amamantado normalmente por su madre, que afortunadamente vive, pero que se encuentra ingresada en otro centro hospitalario.
“Yo me sentí muy contento porque el niño se consoló cuando ya casi era inconsolable"
La joven nodriza solidaria, que es madre de seis niños ya, quería ayuda y no tenía nada que ofrecer, mientras otros ciudadanos llevan comida y mantas ella carece de recursos. Pero ayudar de este modo a los pequeños heridos ha supuesto algo muy importante para ella, ya que se ha dado cuenta que su contribución es igualmente importante.
“Yo vi que todos aportaban algo y como eso era con lo que podía aportar, con eso pude. Nunca lo había hecho. El niño estaba desesperado tenía hambre y frío, encuero y peladito cuando lo trajeron"
En el hospital Darío Contreras de Santo Domingo hay cerca de 84 haitianos con problemas severos, incluyendo piernas y brazos amputados, y de ese total hay 20 niños ubicados en las mejores salas.
“Me enteré de que aquí había niños haitianos muy recién nacidos y vine a ver en que podía ayudar y le estoy dando el seno este niño, éste no es el mío, tengo uno pequeño, pero estoy aquí ayudando, dándole el seno"
Esta noticia, que ha conmovido a muchas personas, por su solidaridad y sencillez, nos recuerda lo importante que es dar el pecho para la supervivencia de los niños en casos de emergencia. Estos de los que hablamos, en el hospital, han recibido consuelo y alimento, pero habrá miles de pequeños supervivientes en Haití, que dependerán para sobrevivir unicamente de la leche que sus madres u otras mujeres puedan darles de sus pechos, proporcionándoles un alimento seguro y no contaminado.
Via | Listindiario.com En Bebés y más | La leche materna salva vidas