Cuando un niño supera una enfermedad grave la alegría es contagiosa. Así se sintieron los alumnos de la Escuela Católica Santa Elena, de Newbury, en Ohio (Estados Unidos) cuando se enteraron de que su compañero John Oliver Zippay, de solo seis años, había finalizado su última ronda de quimioterapia para terminar con la leucemia linfoblástica aguda contra la que luchaba desde 2016.
Así que, su primer día de regreso a las aulas le prepararon un recibimiento muy especial: le esperaban alineados, en el pasillo, para aplaudirle a medida que iba caminando hacia sus padres al final de la larga fila de niños.
Con paso seguro y orgulloso
Al igual que caminó entre sus compañeros de colegio mientras le aplaudían, así avanzó en su enfermedad, a pesar de su corta edad.
Sus padres, John y Megan Zippay, aseguran que:
"Lo está haciendo genial. Se están pasando los efectos secundarios del tratamiento y va muy bien".
Así que como los padres orgullosos que son, compartieron el regreso de su hijo a las aulas en la cuenta pública de Facebook donde cuentan con orgullo los avances de John Oliver e inmediatamente fue compartido sin parar en las redes sociales, alabando el bonito gesto de sus compañeros de colegio, pero también el arduo camino recorrido por el niño.
❤️😭 This 6-year-old beat #cancer! John Oliver Zippay, also known as J.O., had been battling leukemia for 3 years.He received his final round of chemo 2 days after Christmas.He received a standing ovation as he returned to his school!One can only imagine what he has gone through! pic.twitter.com/uXSgZ52nJh
— Solomon Kassa (@SolomonMKassa) 10 de enero de 2020
John, un niño valiente
Según explica su padre, John, "los últimos tres años fueron difíciles".
"No ha podido hacer ninguna actividad física durante tres años, así que tenía que sentarse en la clase de gimnasia, entre otros duros momentos".
En la misma línea se muestra su madre, Megan, al explicar que:
"Quieres que tu hijo crezca y se ensucie, juegue en la calle y se divierta, y sin embargo tuvimos que mantenerle en una burbuja. Ahora miramos hacia el futuro porque tenemos a nuestro hijo de vuelta".
Tras la ovación, se proyectó un vídeo de la valiente batalla de John Oliver, que puedes ver aquí.
El shock fue increíble cuando escucharon la palabra leucemia de boca de los médicos. Su padre asegura que, "en esos momentos todo se detuvo".
Fue en junio de 2016 cuando cayó y se golpeó la cabeza contra la cabecera la cama, cuando sus padres decidieron llevarle a urgencias, porque se quedó pálido y quieto.
Y allí escucharon por primera vez la palabra cáncer, tras realizarle diferentes análisis de sangre. Siguieron 18 días de hospital, donde sus padres y su hermana Bella no se separaron de él, mientras el pequeño se sometía a transfusiones de sangre, biopsias de médula y varias pruebas más.
Pero ahora todo eso es pasado. El último día de quimioterapia de John Oliver, el personal del hospital, la familia y los amigos se reunieron para verlo tocar la campana, que hacen sonar los pacientes cuando terminan el tratamiento.
Su padre dice que le animó a hacerlo por "todos los niños que no tuvieron la oportunidad de tocarla, y la dió tan fuerte... Estaba tan orgulloso".
Vía | Daily Mail
En Bebés y Más | La merecida ovación del público a un niño de ocho años con leucemia que jugó como portero en su equipo de fútbol profesional,