Es increíble la madurez y la templanza de esta niña de cuatro años de Valencia, que sin saberlo, se convirtió en una heroína al pedir ayuda cuando su madre se descompuso en casa.
"Mi mamá no está bien, necesita ayuda. No puede hablar y le pasa algo" es el aviso que dio a los servicios de emergencia del 112 mientras su madre de 32 años estaba sufriendo una crisis epiléptica.
"Nos dio las gracias antes de colgar"
María Guinot, la enfermera del CICU (Centro de Información y Coordinación de Urgencias) que atendió la llamada fue quien mantuvo con la niña la comunicación en todo momento que le explicaba con sus palabras, mientras lloraba todo el rato, lo que estaba sucediendo. "Ella fue mis ojos en todo momento para saber que había", recuerda.
Enseguida se activó una unidad del SAMU que se trasladó al domicilio. La niña estaba avisada para abrir la puerta a los sanitarios que pudieron atender a la madre, quien se recuperó parcialmente y pudo comunicarles que padecía epilepsia. Luego fue trasladada en ambulancia al hospital.
María cuenta a Europa Press que se le ponen "los pelos de punta" al recordar la conversación destacando la recompensa emocional que supuso para ella su actuación.
Le dijo: "Soy María, la enfermera, no te voy a colgar". Y recuerda el alivio de la niña al comprobar que su madre respiraba. "Finalmente, solo fue una crisis epiléptica. Pero que una niña fuera conocedora de la emergencia, cogiera el teléfono y llamara al 112, como enfermera me llegó. Ojalá pudiera darle un abrazo y decirle lo bien que lo hizo", ha expresado.
Por último, recuerda la entereza de la niña que "hasta nos dio las gracias antes de colgar" y espera que la historia sirva a otros pequeños para saber cómo actuar en estos casos.
La importancia de enseñar a los niños cómo actuar
Hemos conocido otros casos de niños que actuaron como ángeles guardianes. Entre ellos, un niño de Madrid de nueve años, quien también salvó la vida de su madre llamando al 112. Y otro que con solo cuatro años también, llamó al servicio de emergencias con la ayuda de Siri cuando su madre se desmayó en casa.
Estos ejemplos demuestran que enseñar a nuestros hijos qué hacer ante situaciones de emergencia y cómo realizar una reanimación cardiopulmonar (cuando ya son capaces de hacerla) o simplemente el marcar el 112, puede ayudarles a solucionar un problema grave cuando no podemos ayudarle, e incluso se puede llegar a salvar una vida.