Muchas personas pasamos ocho horas diarias o más sentados frente a un ordenador en el trabajo o estudiando. De hecho, lo más probable es que ahora estés sentado leyendo esto. Ya sabemos que el sedentarismo es un hábito con consecuencias nefastas para nuestra salud.
Si es tu caso, la buena noticia es que hay una receta para reducir esos efectos dañinos. Keith Diaz, profesor asociado de Medicina del Comportamiento de la Universidad de Columbia y su equipo, han investigado hasta dar con la fórmula perfecta: dar un paseo suave (breve y sin prisas) de cinco minutos cada media hora.
El nuevo estudio fue publicado en la revista Medicine & Science in Sports & Exercise, y según explica su autor en The Conversation, pidieron a 11 adultos sanos de mediana edad que permanecieran sentados durante ocho horas en el transcurso de cinco días.
Uno de esos días, solo se les permitió hacer breves descansos para ir al baño, mientras que el resto de días, interrumpieron ese tiempo con breves paseos, por ejemplo, durante un minuto cada media hora un día, de cinco minutos cada hora otro día... Así hasta dar con el paseo de menor duración posible mientras les monitoreaban los niveles de azúcar en sangre y la presión arterial, ambos importantes factores de riesgo de enfermedades cardiacas.
Pudieron comprobar que "los paseos de cinco minutos cada media hora redujeron en casi un 60 % el pico de azúcar en sangre después de comer", explica Díaz. Esta estrategia también redujo la presión arterial entre cuatro y cinco puntos en comparación con permanecer sentados todo el día.
También tiene beneficios para la salud mental
Las pausas para dar paseos, no solo mejoraron la salud física, sino que también beneficiaron la salud mental. Los participantes dijeron que esas breves caminatas ayudaron a reducir la sensación de fatiga, les ponía de mejor humor y les ayudaba a sentirse con más energía.
Es un pequeño hábito muy fácil de llevar a cabo, ya sea que trabajes en casa o en una oficina, o si eres estudiante. Es algo que cualquiera puede hacer para contrarrestar los nefastos efectos del sedentarismo, enfermedades crónicas que se desarrollan más rápido en personas que no se mueven lo suficiente como diabetes, cardiopatías, demencia y varios tipos de cáncer. Incluso aumenta el riesgo de muerte prematura.
El investigador recuerda que el sedentarismo es "un problema de salud pública del siglo XXI que va en aumento", y de ahí la necesidad de buscar estrategias para combatirlo.