Aunque es común asociar las altas capacidades con la infancia, cada vez son más los adultos que descubren en ellos mismos ciertas características reveladoras que podrían indicar la presencia de esta condición.
Si bien no hay datos oficiales específicos sobre las altas capacidades en adultos, la conciencia sobre la persistencia de estas características más allá de la infancia ha ido en aumento en los últimos años, y cada vez son más los expertos y asociaciones que están empezando a tratar este tema.
No obstante, es importante tener en cuenta que las altas capacidades en adultos se manifiestan de una manera diferente en comparación con los niños, y que la forma de abordarlo es también distinta.
Si eres adulto y siempre has creído tener altas capacidades, este artículo sobre las señales identificativas y los principales desafíos a los que se enfrentan los adultos superdotados aclarará todas tus dudas.
Por qué cada vez más adultos están descubriendo que tienen altas capacidades
Según las investigaciones más recientes, una de cada cinco personas tendría altas capacidades intelectuales, aunque si ya es difícil detectarlas en niños, ¡cuánto más en adultos!
Pero como decíamos al inicio, cada vez son más los adultos que deciden evaluarse ante la sospecha de tener altas capacidades. Los motivos de este creciente aumento de adultos diagnosticados con altas capacidades pueden ser varios:
- Descubrir altas capacidades en los hijos lleva a muchos padres a reconocer patrones similares en sí mismos en lo que respecta a su forma de pensar, características de la personalidad o comportamientos. Este proceso puede desencadenar una reflexión retrospectiva sobre la propia vida, llevando a muchos adultos a darse cuenta de que ellos también fueron niños con altas capacidades a los que, probablemente, no se les prestó la debida atención.
- La conciencia pública sobre las altas capacidades en adultos ha aumentado en los últimos años, lo que ha llevado a una mayor comprensión y reconocimiento de estas características en el ámbito adulto.
- La disponibilidad de información en línea y la difusión de conocimientos sobre este tema han permitido que los adultos reflexionen sobre sus propias experiencias y características, identificando patrones que podrían sugerir altas capacidades.
Ocho señales de altas capacidades en adultos
Las señales de altas capacidades en adultos pueden manifestarse de diversas maneras y variar en intensidad de una persona a otra. Es decir, ni todos los adultos con altas capacidades tendrán las mismas características, ni poseer alguno de estos rasgos es condición exclusiva de altas capacidades.
1. Intereses profundos. Los adultos con altas capacidades suelen manifestar una inmersión y concentración en áreas de interés específicas, y dedicar una cantidad significativa de tiempo a realizar actividades o proyectos que les apasionan. Además, a menudo alcanzan niveles de destreza notables en las áreas de su interés.
2. Reflexiones profundas y existenciales. Con frecuencia, los adultos con altas capacidades reflexionan sobre cuestiones existenciales y filosóficas, y sienten la necesidad de encontrar significado y comprender aspectos más profundos de la realidad. Esta tendencia a explorar las complejidades de la vida, el propósito y la existencia puede llevar a una mayor susceptibilidad a la depresión existencial.
3. Sensibilidad emocional y alto grado de empatía. Al igual que vemos en la infancia, los adultos con altas capacidades tienen un alto grado de empatía y una mayor sensibilidad para percibir las emociones propias y ajenas, lo que en ciertos momentos podría suponer una fuente de estrés y agotamiento emocional.
4. Curiosidad insaciable. A menudo, los adultos con altas capacidades muestran una sed continua de aprendizaje, y disfrutan abordando desafíos intelectuales, buscando nuevos conocimientos y explorando ideas.
5. Hiperactividad mental. Las personas con altas capacidades son muy activas mentalmente y disfrutan ideando nuevos proyectos. Su mente suele trabajar en modo "multitarea" (es decir, piensan en múltiples ideas o problemas simultáneamente, saltando de una idea a otra de manera rápida) y sus pensamientos son arborescentes (una idea da lugar a otra, y a otra, y a otra... como si de las ramas de un árbol se tratara).
6. Perfeccionismo. Por lo general, tener altas capacidades implica también tener unos estándares elevados consigo mismo, ser muy autocríticos y esforzarse por lograr siempre resultados impecables. La búsqueda constante de la excelencia en las actividades y proyectos en los que se participa es crucial para las personas con altas capacidades.
7. Creatividad. Los adultos con altas capacidades tienen habilidad para pensar de manera abstracta, generar ideas creativas y abordar problemas desde perspectivas originales.
8. Independencia. Con frecuencia, las personas que rodean a los adultos con altas capacidades tienden a definirlos como "independientes" a la hora de tomar decisiones o seguir sus propias convicciones. Es decir, no se adhieren a las normas sociales convencionales, y buscan la expresión auténtica de sí mismos.
Soy adulto y tengo altas capacidades, ¿y ahora qué?
A pesar de estas características distintivas, muchos adultos con altas capacidades sienten la necesidad de ocultar su condición. Este fenómeno puede atribuirse a diversos factores, como el miedo al rechazo, la presión social para conformarse con la norma y la percepción de que destacar intelectualmente puede generar envidias o malentendidos.
Sin embargo, identificar las altas capacidades en la adultez no solo te servirá para potenciar tu desarrollo profesional y emocional, sino que a nivel personal te ayudará a entender y aprovechar tus fortalezas individuales y abordar los posibles desafíos que puedan surgir a lo largo de tu vida.
Por eso, si crees que tienes altas capacidades no dudes en acudir a un centro especializado para que te realicen una valoración, y con ayuda de un profesional desarrollar estrategias que te ayuden en tu día a día.
Imagen de portada| Bebés y Más con DALL·E 3