Cuando nuestros hijos llegan a los dos años, es muy común que las personas nos digan: "oye, ya está en edad para que deje el pañal". Se tiene la creencia en muchos aspectos del desarrollo de los niños, que llegada cierta edad están listos para tal o cual cosa. La famosa "operación pañal" suele ser una de ellas.
Y así fue, cumplió dos años Lucía y no faltó quien me dijera que "ya era hora" de que dejara el pañal. ¿Qué hacer como madre primeriza? Te cuento por qué decidí esperar y cómo esto me ayudó a decirle adiós al pañal de una manera fácil y rápida.
Primeros intentos
Quizás me dejé guiar o influenciar por sentirme primeriza en este tema y siendo sincera debo decirte que sí, sí intenté la "operación pañal" poco tiempo después de que me hicieran el comentario acerca de que ya era el momento.
Lo cierto es que como madres y padres nuestra responsabilidad y trabajo es ir guiando a nuestros hijos a través de todas sus etapas. Debemos acompañarles y enseñarles para que ellos poco a poco vayan aprendiendo. Me gusta estar activa y presente en los pasos que da mi hija, y el despedirse del pañal no es la excepción.
Así que pasados los dos años comenzamos a hablar del tema, yo le explicaba que eventualmente ella dejaría de usar pañal, le puse algunas canciones, la llevaba conmigo al baño y le mostraba cómo funcionaba todo este asunto. Probamos andar sin pañal algunos días pero ella aún no estaba lista.
En total, fueron tres intentos los que ocurrieron antes de que mi hija dejara el pañal por completo durante el día. Pero la verdad es que esos primeros intentos fueron difíciles desde un principio porque ella no estaba lista. Y como no quería que esta fuera una mala experiencia, decidí que sería paciente y esperaría.
Así que solamente se quedaron en eso, intentos, porque decidí que no sería yo quien dictara cuándo era el momento de que Lucía dejara el pañal. La única persona que podía decidir sobre eso era ella y nadie más.
Por qué decidí esperar
Sé que la mayoría de la gente piensa que hay una edad específica para que los niños dejen el pañal, pero desde que mi hija era una recién nacida comprendí que no todos los consejos funcionan con todos los niños.
Te comparto las razones por las que decidí esperar el mayor tiempo posible:
Porque no quería presionar a mi hija
Este es el motivo más grande de todos. Lo cierto es que para mí el hecho de dejar el pañal es un gran paso en la vida de un niño, y por lo tanto, creo que debe ser una experiencia positiva y buena para ellos.
El presionarles a hacer algo cuando no están de humor, no lo desean o no están listos, suele ser contraproducente. Simple y sencillamente, no quería que decirle adiós al pañal fuera algo difícil o tormentoso para ella.
Porque sé que cada niño se desarrolla a su propio ritmo
Esta segunda razón es porque desde sus primeros meses, me di cuenta que aunque hay ciertas guías para vigilar que nuestros hijos se desarrollen adecuadamente, no todo es igual para todos los niños.
Cada uno se desarrolla a su propio ritmo y su propio nivel. Los procesos de maduración de cada uno son distintos y el hecho de que uno haya dejado el pañal el día que cumplió los dos años, no quiere decir que todos lo harán.
El mejor momento para dejar el pañal es cuando nuestros hijos nos lo dicen. No el pediatra, no los maestros, no la vecina ni la abuela. Cada niño nos va marcando el momento en que está listo para una nueva etapa en su vida.
Porque no tenía prisa
¿Por qué esa presión por quitarles el pañal cumplidos los dos años o porque es verano? Aunque es cierto que en verano resulta más fácil hacerlo, nunca he entendido por qué debe ser una obligación hacerlo en esa época sí o sí, donde a veces se corre el riesgo de adelantarnos demasiado solo porque es verano. Comprendo que llega un momento en el que es tedioso seguir cambiando pañales, pero eso no quiere decir que solo porque estamos cansados de hacerlo ya es el momento de dejarlos.
Nunca tuve ninguna prisa por quitarle el pañal a mi hija, al contrario, creo que ser paciente y esperar a que ella sola estuviera lista fue lo que ayudó a que casi no nos diéramos cuenta que ya lo había dejado.
Porque no quería batallar
La pura verdad. Sé que quizás me escuche como mala madre o madre floja, pero después de leer muchos artículos donde recomendaban decenas de accesorios y recursos para dejar el pañal, no me quedaban ganas de hacer nada.
He leído experiencias de madres que andan cargando para todos lados con el orinal (que cada vez vienen con más cosas para entretener al niño sentado mientras esperamos ansiosamente a que haga pipí) o que llevan al niño al baño cada media hora para ver si le dan ganas o que se la pasaban limpiando accidente tras accidente debido a que evidentemente sus hijos aún no estaban listos para dejar el pañal.
Yo sabía que no quería eso. Quería lograr que mi hija dejara el pañal de la manera más respetuosa posible sin que se convirtiera en una odisea, y eso lo haría escuchándola, no empujándola a hacerlo ni diciéndole que "ya es mayor" para seguir llevando pañal.
Al final, un buen día por la mañana mi hija despertó y pidió ir al baño. Así que le quité el pañal, hizo pipí, le puse un calzón y nunca más volvió a usar un pañal durante el día porque ella así lo decidió. La "operación pañal" pasó prácticamente inadvertida porque esperamos hasta que ella nos indicara cuándo sería el momento de dejarlo.
Comparto mi experiencia porque sé que algunos padres se sienten presionados o les preocupa que su hijo aún use pañal. La mía lo dejó apenas hace un mes, unos días antes de cumplir tres años y quise esperarme justamente este mes para comprobar que la despedida había sido definitiva.
Es válido utilizar canciones para dejar el pañal, hablar con ellos y hacer la prueba para ver si están listos, pero recuerda que no hay una edad específica ni obligatoria para dejarlo, ya que cada niño se desarrolla a su propio ritmo.