La infancia es una de las etapas más importantes en la vida. Durante ella, nuestros hijos aprenden a desarrollarse como personas, conociendo sus habilidades y creando memorias para sus años venideros.
En este último punto, uno de los momentos que suele quedarse grabado en nuestra memoria son las vacaciones familiares, que guardan un lugar muy especial en el corazón.
Pero además de ello, las vacaciones tienen un impacto muy grande y positivo en los niños a largo plazo, influyendo también en felicidad y su salud emocional para toda la vida. Te cuento los diversos beneficios que ha encontrado la ciencia sobre las vacaciones familiares para los niños.
Un recuerdo para toda la vida
No sé si a todas las personas les suceda lo mismo, pero al menos en mi caso las vacaciones son uno de los mejores recuerdos de la infancia. A pesar de que algunas personas pueden pensar que no vale la pena viajar cuando los niños son pequeños porque no recuerdan mucho, yo pienso lo contrario.
Es cierto, quizás no recuerdo a detalle los sitios que visité con mis padres cuando era niña, ni tampoco tengo claro en mi mente todas las veces que visitamos familia fuera de la ciudad durante las vacaciones. Pero guardo en mi mente y corazón las sensaciones que viví. Te comparto un ejemplo:
Todos sabemos que conforme vamos creciendo, olvidamos aquellos primeros años de vida. Pero a pesar de que no recordamos cómo era nuestra vida en ese entonces, seguro todos podemos tener la certeza de que recibimos amor y atención. Algo similar me sucede con las vacaciones.
Aunque no tengo en mi mente cada detalle, recuerdo que las disfrutaba mucho y ahora que soy adulta las vacaciones familiares son una de las partes que más añoro y pienso con cariño de mi infancia, tanto los viajes a un lugar nuevo, como las visitas a familia fuera de la ciudad.
Los beneficios de las vacaciones familiares en los niños
Volviendo al tema central de este escrito, además de contarte el impacto personal que tuvieron las vacaciones familiare en mi infancia (y a largo plazo), vamos a ver qué dice la ciencia sobre ellas.
De acuerdo con una investigación, las vacaciones familiares tienen un impacto muy positivo en niños y adolescentes, especialmente a nivel emocional. Según los resultados de este estudio, los niños que viajan más tienden a tener una mayor independencia, autoestima y confianza en sí mismos, además de ser más tolerantes y respetuosos, y tener una mejor disposición para aprender y probar cosas nuevas.
En el caso de los niños que pasaban un tiempo en vacaciones con los abuelos, un estudio encontró que esta experiencia les hace más empáticos y respetuosos hacia las personas de edad avanzada, evitando la aparición de prejuicios.
Por otro lado, el efecto a largo plazo de las vacaciones familiares en la infancia lo señala un estudio realizado en 2015. De acuerdo con la investigación realizada, un 55% de los adultos compartió que las vacaciones familiares les dejaron recuerdos felices para toda la vida, y un 24% mencionó que pensar en esos recuerdos les ayudaba a pasar los momentos difíciles.
Finalmente, tenemos una entrevista que compartimos hace unos años en Bebés y más, en la que el psicólogo infantil Oliver James nos proponía gastar menos en juguetes y destinar ese dinero a una vacaciones familiares, con un simple pero poderoso argumento:
"[...]las vacaciones familiares son valoradas por los niños, tanto en el momento que ocurren, como por mucho tiempo después de que pasaron en sus recuerdos. Así que si vas a gastar dinero en algo, es muy clara cuál es la opción que tiene más sentido."
De acuerdo con él, lo que los niños realmente valoran de las vacaciones, es esa rara posibilidad que ellas crean para tener periodos prolongados de juego con sus padres. Las vacaciones nos aíslan de las presiones de la vida diaria, donde todo mundo está apurado por asistir a reuniones o cumplir con fechas límites. Son épocas donde todos están relajados y pueden ser juguetones juntos.
No tiene que ser un viaje costoso
Como lo hemos visto, las vacaciones familiares dejan una huella importante en los niños, acompañándoles durante el resto de su vida. Algunos padres pueden pensar que las vacaciones deben ser costosas o espectaculares para tener este efecto, pero no es así.
En realidad, y como se ha mencionado unas líneas atrás, lo más especial de las vacaciones para los niños es el tiempo con sus padres, fuera de la rutina y simplemente conviviendo juntos.
Foto de portada | Yulianto Poitier en Pexels