La entrevista de esta semana está dedicada a Ana Pérez Marcos, una mamá viajera que disfruta enseñándole el mundo a su hijo Lucas, de tres años.
Ana tiene 37 años, es consultora de marketing y comunicación para empresas de turismo, tiene un blog giramondoana, y su marido es Director de Ventas en una empresa de Telecomunicaciones. Siempre que pueden, hacen las maletas y salen a descubrir el mundo en familia.
Lucas ya es un experto viajero. Ha conocido lugares exóticos como Isla Reunión, Senegal, Kenia o Costa Rica y en otros más "mundanos" como París, Miami o Toscana.
¿Viajabas antes de ser madre?
Si, a mi marido y a mi siempre nos ha gustado viajar y hemos vivido tambíen en el extranjero (Estados Unidos, Australia o en mi caso Italia). Solemos organizar nosotros mismos los viajes, leer mucho antes de elegir el destino y luego sacar billetes y contratar como mucho algunos hoteles en el itinerario. Después dejamos que los lugares y sus gentes nos sorprendan.
Hay madres que no conciben viajar con un niño tan pequeño a sitios tan exóticos como a los que habéis viajado con Lucas. ¿Qué consejos les darías? ¿Qué precauciones tomar? ¿Como os organizáis?
Es normal que cuando eres madre tengas ciertos temores de viajar con niños. Yo ahora me hago preguntas que antes ni me hacía antes de salir de viaje y tienes que organizarte un poco más pero creo que es muy enriquecedor viajar tanto para los padres como para los niños. Los más pequeños aprenden muchísimo no sólo de otras culturas sino por ejemplo a ser pacientes, a esperar, a compartir en el camino con otros niños y comunicarse y jugar allá donde vayan y da igual el idioma que se hable.
Yo creo que los límites están en la mente de los adultos y no tenemos que dejar que esas limitaciones nos echen para atras y renunciar a todo lo positivo que aportan los viajes.
Depende mucho de cómo las mamas sean y les guste viajar porque es diferente viajar por tu cuenta que en viaje organizado. Pero yo creo que lo importante es informarse bien sobre el destino antes de decidir el viaje, saber si es fácil coger transportes públicos o alquilar un coche, si es seguro y tiene hospitales o centros médicos donde acudir en caso de necesidad, cómo son las infraestructuras, si existen centros comerciales o tiendas donde abastecerse y actividades atractivas para los niños.
Nuestra compañera de viaje suele ser la guia Lonely Planet, muy práctica y también leemos blogs de viajes y recomendaciones de otros viajeros que ya han estado en el destino. Recomiendo tambíen pasar como mínimo un par de días en cada sitio y no querer abarcar demasiado sino que el niño marque un poco el rítmo de las actividades.
Luego hay algunos problemas de logística que siempre se solucionan con imaginación. Mi hijo Lucas se ha acostumbrado a dormir incluso en los restaurantes colocando dos sillas una frente a otra a modo de cama o ha dormido en colchonetas cuando no había cama supletoria. Los niños tienen un capacidad asombrosa de adaptación que no tenemos los adultos y a veces lo que nosotros vemos como un problema ellos lo encuentran divertido.
Viajar con niños es muy enriquecedor porque al final los destinos acabas viéndolos a través de sus ojos, los viajas de verdad no los visitas, los conoces más gracias a su curiosidad, o te paras más a hablar con la gente local. Un niño te hace ser más viajero que turista.
¿A que sitios habéis viajado con Lucas? ¿Cuál es el viaje que más ha disfrutado?
El papá de Lucas es francés y su abuelo vive en Isla Reunion, una isla francesa al Sur de Isla Mauricio en el Océano Indico. Fuimos allí cuando Lucas tenía 4 meses para conocer a su abuelo y sus tías. Además de visitar playas preciosas con él hicimos 3 días de treking en el Circo de Cilaos, un lugar en el que no hay carreteras solo senderos. Llevábamos a Lucas en una mochila portabebés y dormimos en refugios de montaña, yo le daba el pecho en las paradas del camino.
El verano pasado viajamos a Costa Rica y en Navidades a Senegal. Este verano lo hemos pasado recorriendo Kenia, sus parques nacionales y algunas de sus playas. Creo que los dos viajes que más recuerda y en los que más ha disfrutado han sido Costa Rica y Kenia. En ambos lugares hay una naturaleza increible y vimos muchos animales que Lucas tiene en cuentos, figuritas y Playmobil.
Además, los hoteles en los que nos quedamos solían tener piscina y las tardes las solíamos pasar de relax y en remojo, los últimos días los pasamos en las playas. Creo que todos estos ingredientes hicieron que Lucas disfrutara muchísimo y que aún recuerde con mucho cariño ambos viajes.
¿Qué es lo que os motiva a viajar con un niño tan pequeño?
El pensar "y por que no?". Nosotros siempre hemos sido muy viajeros y no queríamos renunciar a esta pasión sino compartirla con nuestro hijo.
¿Nos cuentas alguna aneccdota graciosa?
Creo que lo más bonito que nos paso este verano en Kenia fue compartir con la gente masai su sabiduría tradicional. Un día que volviamos de safari Lucas debió de tocar en el campamento donde dormiamos una planta con espinas y se le quedaron clavadas en toda la palma de la mano.
Cuando empezó a quejarse y yo no sabía que hacer para quitárselas apareció Wilson, uno de los chicos masais que trabaja en el Cheetah Tented Camp en Masai Mara. Wilson cogío con todo su cariño la manita de LUcas y empezó a frotarla contra su cabeza de un color negro intenso y un pelo muy aspero y corto.
Poco a poco las espinas desaparecieron y Lucas le miraba con ojos de admiración, parecía que estaba viendo a un mago!! Los masais son muy "niñeros" y son excelentes guías y cuidadores. Yo me quedo con la cara de Lucas ese día, le contaré esta anécdota cuando sea más mayor para que siempre lo recuerde.
¿Cuál es vuestro próximo destino?
Bueno, aún no lo hemos decidido pero no nos importaría volver con Lucas a Tailandia donde estuvimos de solteros, allí es increiblemente fácil viajar a tu aire y vimos entonces muchas familias con niños. Nos apetece volver a Asia así que creo que nos decantaremos por este continente.
Agradecemos a Ana, la mamá viajera, que nos haya concedido esta entrevista y que nos haya abierto las puertas para conocer a su maravillosa familia. Os deseamos que sigáis disfrutando de vuestros viajes y que siempre haya un próximo destino por descubrir juntos.
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