Continuamos sugiriendo cenas sanas para los peques, para hoy hemos elegido un poco de pescado con ensalada, que seguro hará las delicias de toda la familia. La receta para cenar saludable, es de boquerones en vinagre acompañados de ensalada de escarola al ajo-aceite.
En primer lugar, necesitamos comprar los boquerones frescos y congelarlos un para de días para evitar el tan temido anisakis. Una vez que han pasado las 48 horas, los descongelamos en la nevera y cuando están listos, limpiamos bien los boquerones (se le puede pedir al pescadero que nos los dé limpios antes de congelarlos). Debemos lavarlos bien para que pierdan toda la sangre y queden blancos. Después se dejan escurrir.
Preparamos una salmuera para que se hagan los boquerones: en una fuente disponemos los boquerones y los cubrimos con una cantidad de vinagre suficiente. Además echamos unas cucharadas de sal procurando que ésta quede bien disuelta.
Lo dejamos en la nevera al menos ocho horas. Para saber si están listos para comer, lo mejor es probarlos y ver si están blancos y tersos. Para prepararlos, los escurrimos bien de la salmuera, los pasamos a una fuente y hacemos una picada de ajo y perejil bien abundante y un buen chorro de aceite de oliva virgen extra, podemos acompañarlos de unas aceitunas.
Para la ensalada, lavamos la escarola que podemos encontrar en bolsas, la escurrimos y la echamos en una fuente. En un mortero machacamos ajo le añadimos aceite de oliva. Echamos sal a la escarola y el aceite y ajo y removemos todo dejando reposar unos minutos para que tome el sabor.
En un plato, ponemos unos boquerones y un poco de escarola y a cenar.
El boquerón al ser pescado azul es un alimento rico en vitamina B6 y B3 entre otras, esto hace que sea un alimento beneficioso para el sistema circulatorio, ayuda a reducir el colesterol, es recomendable para combatir enfermedades como la diabetes, la artritis, es muy recomendable en casos de diabetes, depresión, asma y ayuda a prevenir enfermedades cardíacas.
La escarola contiene fibra y un 94% de agua por lo que es baja en calorías, también tiene hidratos de Carbono y fibra. Es rica en nutrientes que favorecen al cabello, colágeno, piel, dientes y huesos, aumenta la resistencia a las infecciones, mejora el tránsito intestinal y es beneficiosa para el sistema digestivo, páncreas y funciones biliares.
Por todo ello, es una cena saludable y nutritiva para los peques.
Imagen | juantiagues