Hace unos días hablé del problema de las guarderías clandestinas en Fuente Álamo, Murcia, en que dado el gran número de jornaleros con horarios de más de 12 horas que hay en el pueblo, sus hijos son cuidados por vecinos del pueblo que hacen negocio de ello.
Quise ir a la raíz del problema, que no es que existan este tipo de guarderías, pues esto es la consecuencia, sino que las madres de estos hijos trabajan 12 horas y sus hijos deben ser cuidadas por los vecinos del pueblo al no poder dejarlos en las guarderías municipales ya que la ley indica que un niño no puede estar más de 8 horas en una guardería.
Como posible solución nombré dos, disminuir la jornada laboral o llevar al niño al trabajo. Esto último, que suena tan extraño, lo es en nuestro país (y en muchos otros) pero no es una práctica extinguida en el mundo, ni mucho menos.
En esta foto, podemos ver a un papá (creo que de Almería) trabajando con su hija. Sé de un profesor de Ciencias Económicas que se lleva a su hija a dar clases y seguro que hay muchos casos más que desconozco.
La pregunta es: ¿por qué no? Sé que suena totalmente disonante en un momento de la sociedad en que los niños parecen molestar para todo. Ir a la peluquería, al médico, al supermercado, a cenar con los amigos, a una boda, a... todo son eventos en que parecen no tener cabida y donde a menudo hasta te miran mal si te llevas a tu hijo (que no lo entiendo ni quiero) pero hay trabajos en que un niño puede estar con su padre o madre perfectamente sin que ello suponga ningún problema y me parece que sería una buena opción. Repito, opción.
Esto sí es una medida de conciliación laboral y familiar. Extraña por lo inhabitual, pero tremendamente eficaz, ¿o no?
Aquí os dejo otra foto de una barrendera de México que lleva a su niño al trabajo.
Foto barrendera | Cozybebe En Bebés y más | Guarderías clandestinas en Informativos Telecinco