¿Recuerdas ese momento en el que te despides de tu hijo para ir a dar a luz a otro bebé? Yo sí, y lo recuerdo como una montaña rusa de emociones. Es un instante muy especial en el que sabes que la próxima vez que lo veas ya no será tu pequeño, que en pocas horas, o minutos, habrá otro que ocupe ese lugar.
Porque una foto vale más que mil palabras, precisamente por todos los sentimientos que resume en una imagen, se ha hecho viral esta emotiva foto de una madre abrazando a su hija antes de darle la bienvenida a un nuevo bebé, capturada por la fotógrafa de nacimientos Laura Paulescu, de Crowned Photography.
Adiós al hijo mayor
La fotógrafa congeló ese instante justo antes de que la madre diera a luz a su tercera hija. El último abrazo a su pequeña y la última vez que se sentaba encima de su barriga con su hermana dentro.
La llegada de un nuevo hermanito es un acontecimiento que no todos los niños reciben de la misma manera, como es lógico, especialmente si es el hermano mayor que no quiere ser destronado. Con un nuevo bebé, cambia la dinámica familiar y para algunos niños puede ser un trance muy delicado en su vida. La familia cambia y evoluciona con cada nuevo miembro.
Pero para los padres, y en este caso para la madre, la llegada de un nuevo bebé también supone un antes y un después: ya nada volverá a ser como hasta ahora. Sobretodo, ese momento clave en el que el hijo mayor deja de ser hijo único. Es una mezcla de alegría e ilusión por la llegada de otro hijo, pero también de culpabilidad (al menos yo la he sentido) y preocupación por lo que viene.
Creo que en lo más íntimo todas las madres nos sentimos en algún punto culpables de destronar al hijo mayor. A mí me ha pasado. Cuando nació la segunda tenía mil dudas sobre mi forma de quererla. Te aferras a tu primer amor y te preguntas si se podrá querer tanto a dos hijos como se quiere al primero. Es algo que con la tercera ya no me cuestioné. Porque comprobé que sí, se puede. El amor no se divide, ni se reparte por porcentajes. El amor por los hijos se multiplica.
Y tú, ¿cómo recuerdas ese momento en el que despediste a tu hijo antes de dar a luz a tu siguiente bebé?