Algo que nos pasa a muchas mujeres cuando nos convertimos en madres, es que notamos que nos volvemos un poco... distraídas. Esto es conocido como momnesia o la 'amnesia de las madres', y es algo que experimentamos desde el embarazo, cuando comienza a fallarnos nuestra memoria a corto plazo, debido a todos los cambios hormonales que vivimos y que producen cambios en la actividad cerebral.
Pero estos cambios en el cerebro, también traen cosas buenas. Un nuevo estudio descubrió que cuando piensas en tus hijos, tu memoria mejora. Te contamos por qué.
Realizado por investigadores de la Universidad de Binghamton y publicado en el Journal of Experimental Psychology: Learning, Memory, and Cognition, el estudio analizó las diferentes maneras en las que afecta el proceso evolutivo a la memoria humana.
Se llevaron a cabo pruebas en los participantes para evaluar su capacidad de recordar una serie de palabras y se les pedía imaginar que se encontraban en unos pastizales ancestrales de África. Debido a que la evolución y selección natural prioriza cosas como tener bebés y la supervivencia, no resultó sorprendente encontrar que era más fácil recordar detalles e información relacionadas con ellos.
Cuando las pruebas estaban relacionadas con la crianza de los hijos, se encontró que la capacidad para recordar la serie de palabras mejoraba. De acuerdo con el estudio, la razón por la que esto sucedía se debe a que la memoria experimentaba una especie de empuje o aceleración, similar a lo que ocurría cuando les planteaban un escenario o situación de supervivencia.
Esto sugeriría que nuestros cerebros trabajan mejor y de manera más ardua para recordar información importante cuando se trata de proteger o cuidar a nuestros hijos. Ralph Miller, uno de los autores del estudio y profesor de psicología, explica lo siguiente en entrevista para Psych Central:
"Nuestra habilidad para pensar y memorizar información proviene de nuestros sistemas nerviosos. Debido a que éstos son un producto de la evolución y experiencias pasadas, uno puede esperar que lo bien que hoy memoricemos algo está influenciado por la selección natural que ocurrió con nuestros ancestros hace mucho tiempo".
Quizás en el día a día aún tengamos un poco de esa momnesia y olvidemos cosas básicas como el lugar donde dejamos las llaves o a qué veníamos a la habitación. Pero cuando se trata de nuestro instinto de supervivencia y de la crianza y cuidado de nuestros hijos, nuestro cerebro trabaja de mejor manera.
Foto | iStock
Vía | Romper
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