Hoy, 18 de noviembre se celebra el Día Europeo para el Uso Prudente de Antibióticos. Los antibióticos son medicamentos muy poderosos que mal utilizados pueden traer graves consecuencias, especialmente cuando hablamos de niños pequeños. Entre ellas, que dejen de curar cuando realmente sea necesario. Por eso, úsalos bien.
El 46% de españoles todavía creen que los antibióticos son efectivos contra resfriados y gripe. Pero estos no matan los virus, por tanto no curan enfermedades producidas por un virus como dolor de garganta, tos, gripe o resfriados, y mucho menos sirven para prevenir. Sólo curan aquellas enfermedades producidas por infecciones de origen bacteriano, como la amigdalitis o la faringitis bacterianas.
El uso de antibióticos en bebés menores de un año está asociado con un mayor riesgo de asma en los niños, riesgo que crece cada vez que se aplica un nuevo tratamiento, así como un mayor riesgo de desarrollar obesidad, ya que podría acabar con bacterias saludables que influyen en cómo procesamos nutrientes en nuestro cuerpo.
Es un medicamento que debe ser siempre prescrito por el médico después de comprobar que la infección es producida por una bacteria y no un virus. Otra recomendación muy importante es administrar la dosis indicada por el médico, la cual es calculada según el peso del niño, respetar el tiempo de tratamiento, y no utilizar antibióticos que le hayan sido recetados en otra ocasión o a otra persona.
Más información | www.antibioticos.msc.es y European Centre for Disease Prevention and Control Foto | makelessnoise en Flickr En Bebés y más | ¡Sin antibióticos, por favor!, un vídeo sobre el mal uso de los antibióticos, ¿En qué casos son útiles los antibióticos?