Uno de los hábitos de higiene más importantes para los niños por su repercusión cuando llegamos a la edad adulta es el cepillado. Por eso es tan importante crear el hábito y hacerlo bien desde que aparece el primer diente. Sin embargo hay un factor al que no se le suele prestar mucha atención (más allá del color o del dibujo que tenga), y es el cepillo de dientes. Por eso debemos tener en cuenta algunos factores para elegir el más adecuado, ya que esto puede marcar la diferencia entre unos dientes sanos y otros con caries.
¿Cómo escoger el mejor el mejor cepillo para un niño?
El cepillo de dientes se debe elegir de acuerdo a su edad, aunque en la primera infancia (de los 0 a los 6 años), debemos cumplir con ciertas características, siempre teniendo en cuenta que en estas edades somos los padres quienes debemos lavarles los dientes a los niños. Para definir estas condiciones fundamentales que debe reunir el cepillo perfecto para cada niño, hablamos con Lara Concellón (@loscoloresdelosdientes), odontopediatra especialista en atención a la diversidad en Espai Koala.
De 0 a 3 años
El cepillo que usemos con los más pequeños debe tener el cabezal pequeño, cerdas blandas, siempre debe ser de nylon (nunca de silicona porque estas no limpian ni siquiera los dientes de leche), y tener un mango adaptado ergonómico gordo (no importa su longitud), para que nosotros les podamos cepillar bien y ellos lo puedan coger cuando les apetezca. Es muy importante que sea blando porque suelen morderlo.
También puede ser importante buscar uno que les motive para que el hábito les resulte más divertido, ya que durante esta etapa empiezan a explorar su autonomía y al final seguramente van a querer lavarse los dientes "solitos".
De 3 a 6 años
Cuando el niño ya tienen muelas, el cabezal puede ser un poco más grande (pero no demasiado), el mango debe ser gordo porque insistirán con más frecuencia en lavarse los dientes solos, y aunque tienen mejor motricidad, somos nosotros quienes debemos lavarles los dientes antes o después.
También "es importante tener en cuenta que durante esta edad aún no se recomiendan los cepillos eléctricos porque estos no oscilan sino vibran, así que no limpian lo suficientemente bien", afirma Lara.
De 6 años en adelante
Los niños no se deben lavar los dientes solos hasta los ocho años o "al menos hasta que no se aten los zapatos con los ojos cerrados y escriban con letra cursiva", menciona la odontóloga, ya que son señales de que su motricidad se ha desarrollado perfectamente como para que se puedan encargar por sí solos.
Imagen | mdjaff
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