El botiquín de primeros auxilios nos puede sacar de más de un apuro y debe contener artículos imprescindibles como:
- Termómetro y el antipirético que sueles administrar al niño
- Jarabe para la tos, antihistamínicos y antidiarréicos
- Gasas, vendas y apósitos
- Agua oxigenada, alcohol, tijeras, algodón, suero fisiológico y yodo
- Pomadas para quemaduras, para picaduras y para erupciones
Esta es una lista de artículos básicos. Por supuesto, el contenido varía según las necesidades específicas de cada niño o familia. En verano, por ejemplo, debemos agregar repelente de insectos y cremas para quemaduras solares.
Si nos vamos de viaje, podemos armar un botiquín más pequeño para llevar en el coche o en la maleta para cualquier eventualidad.
En el mercado hay kits de botiquines de primeros auxilios con los productos que usamos más habitualmente. Igualmente, podemos hacerlo nosotras mismas destinando una caja resistente para guardar todos los artículos. Así, estará todo en el mismo sitio para recurrir ante cualquier urgencia.
Ah…, y no olvides guardar el botiquín fuera del alcance de los niños en lugar fresco y seco y revisar periódicamente la fecha de caducidad de los medicamentos.
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