"Tápate al estornudar" es una de esas típicas frases que los padres repetimos con insistencia y que no pierden vigencia, especialmente en los meses de invierno cuando se dispara la epidemia de gripe. También les enseñamos a taparse preferiblemente con el antebrazo en lugar de con las manos, para evitar que así el contagio se extienda cuando los niños tocan juguetes u otras superficies.
Pero ese pequeño gesto que enseñamos hacer a nuestros hijos cada vez que estornudan o tosen podría no ser suficiente, según lo ha demostrado una nueva investigación que se acaba de publicar en Proceedings of the National Academy of Sciences . Taparse la nariz y la boca al estornudar no evita el contagio de la gripe a otras personas; el simple hecho de respirar sería capaz de propagarlo.
Hasta ahora creíamos que el virus se transmitía al expulsar por boca y nariz pequeñas partículas al toser y estornudar, y no es que no sea cierto, pero es aún peor de lo que pensábamos. El solo hecho de respirar es suficiente para propagarlo, puesto que el virus es capaz de viajar en pequeñas partículas o "aerosoles" (núcleos de gotitas) generados con la respiración.
"Mostramos que estornudar es algo infrecuente y no importante para la aerosolización del virus influenza, así como que tampoco se requiere toser para lograr este efecto".
Para comprobarlo, investigadores de la Universidad de Maryland evaluaron a 355 voluntarios, de los cuales 142 fueron diagnosticados con infección confirmada del virus de la influenza o gripe. Realizaron pruebas en las que los participantes tosían, estornudaban, hablaban y respiraban en una máquina durante 30 minutos.
Al analizar las muestras de aliento, los investigadores descubrieron que casi la mitad de las partículas de aerosol recolectadas en ausencia de tos también contenían virus, lo que sugiere que simplemente inhalar aire lleno de gérmenes sería suficiente para contagiarse.
Sin embargo, señalan que luego no se rastreó la transmisión para saber si efectivamente esas gotas hubieran contagiado a alguien, pero la presencia de virus en los aerosoles sugiere según palabras de uno de los autores del estudio que "si esa persona a tu lado parece realmente enferma, incluso si no están tosiendo, probablemente pueda contagiarte".
Evitar el contagio en niños
Si a los resultados del estudio le sumamos que los niños cuentan con una alta tasa de contagio, es prácticamente imposible evitar la transmisión del virus entre los más pequeños. Al compartir sitios cerrados con gran concentración de niños, como sucede en guarderías o colegios, son un colectivo muy susceptible al contagio de virus y bacterias.
De todas formas, se sigue recomendando la vacunación en niños dentro de grupos de riesgo como una forma efectiva de prevenir el contagio, además de las medidas de prevención habituales como el lavado frecuente de manos, ventilar la casa, utilizar pañuelos desechables de un solo uso y evitar el contacto directo con personas enfermas.
Vía | Time
En Bebés y más | Conesjos para prevenir la gripe en niños, Ya está aquí la epidemia de la gripe: ¿cómo podemos prevenirla?