Normalmente, los niños no deberían ir con fiebre al colegio o si se encuentran malitos, pero este curso esa máxima cobra aún más importancia, pues detrás de este síntoma podría haber un posible caso de coronavirus. También deberemos estar atentos a otros síntomas y ser responsables en el caso de que nuestros hijos presenten alguno de ellos.
¿Como saber si el niño puede o no acudir al colegio? Los especialistas recomiendan que los niños se queden en casa y consultar con los profesionales sanitarios si hay fiebre u otros síntomas como tos persistente o problemas gastrointestinales.
El protocolo insiste en que los niños y docentes no deben ir a la escuela y quedarse siempre en casa con síntomas compatibles con el coronavirus como:
- Fiebre o febrícula superior a los 37,2 grados (en Madrid). Varía según el protocolo de cada comunidad autónoma: en Extremadura y Galicia es a partir de los 37,5 grados y en País Vasco de los 37, por ejemplo.
En niños no siempre aparece fiebre, por lo que debemos estar atentos también a otros síntomas como:
- Tos persistente
- Congestión nasal
- Dolor de garganta
- Dificultad respiratoria
- Dolor torácico
- Dolor de cabeza
- Dolor abdominal
- Vómitos
- Diarrea
- Dolor muscular
- Malestar general
- Lesiones o manchas en la piel
- Disminución del olfato o el gusto
- Escalofríos
Qué hacer si aparecen estos síntomas
Si el niño está en casa y aparece alguno de estos síntomas, deberéis contactar con el centro de salud (preferentemente por teléfono) y avisar al colegio. El médico lo valorará y si se le realizará la prueba PCR si lo considera un caso sospechoso.
Según la Guía de actuación ante la aparición de casos de Covid en centros educativos del Ministerio de Sanidad, si el niño se encuentra en el cole y aparecen síntomas que podrían ser compatibles con Covid-19, será aislado en una sala separada, se le proporcionará una mascarilla quirúrgica y se avisará a los padres, quienes deberán contactar lo antes posible (preferentemente por teléfono) con su centro de salud para que sea evaluado por su pediatra, o llamar al teléfono de referencia de su comunidad autónoma.
Si el cuadro es de gravedad o el niño presenta dificultad respiratoria, en cualquiera de ambas situaciones, se deberá llamar al 112. Si está en el centro, se informará a los padres.
De darse un casos sospechoso, el niño o la niña deberá permanecer aislado en su domicilio mientras se realizan las pruebas diagnósticas (PCR) y la actividad docente continuará de forma normal como si nada hubiera ocurrido.
En caso de PCR positiva
Una vez obtenido un resultado positivo para SARS-CoV-2, los servicios de salud pública contactarán con los centros educativos y las familias.
El paciente positivo no deberá acudir al centro y deberá permanecer en aislamiento hasta transcurridos tres días del fin del cuadro clínico y un mínimo de 10 días desde el inicio de los síntomas.
- Si el niño es asintomático, deberá permanecer en aislamiento hasta 10 días desde la fecha de toma de muestra para PCR con el primer resultado positivo.
- En caso de darse en un alumno que forma parte de un grupo burbuja, todo el grupo se considerará contacto estrecho. Se realizará PCR según los protocolos de cada comunidad y se deberá guardar una cuarentena de 14 días (aunque el resultado de la PCR sea negativo).
Tan sólo en el caso de realizarse una PCR a los 10 días del último contacto con el positivo podría acortarse la cuarentena, si ésta es negativa.
- En el caso de darse en un alumno que no forma parte de un grupo burbuja, se determinarán los contactos estrechos para realizar test PCR y guardar cuarentena, excepto aquellos que hayan tenido una infección previa documentada con una PCR positiva en los 6 meses previos.
¿Qué es exactamente un contacto estrecho? Se considerará contacto estrecho a cualquier alumno que haya compartido espacio con el caso confirmado a una distancia menor a dos metros, durante más de 15 minutos sin haber utilizado la mascarilla, excepto los alumnos entre 6-11 años que se clasificarán como contacto estrecho independientemente del uso de la mascarilla.
También los convivientes de los casos confirmados y cualquier profesional del centro educativo, profesor u otro trabajador, que haya compartido espacio con un caso confirmado a una distancia menor a dos metros del caso sin mascarilla durante más de 15 minutos.
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