El departamento de Salud del País Vasco acaba de detectar en Vizcaya un caso de sarampión en un bebé de 20 meses que no estaba vacunado. Las autoridades afirman que este caso está relacionado con el brote ocurrido en Navarra, y ya se han puesto en marcha determinadas medidas para evitar la aparición de nuevos contagios.
Recordemos que el sarampión, lejos de ser una enfermedad erradicada, está sufriendo un importante incremento en toda Europa. En 2017, la OMS registró 21.315 casos (con 35 fallecidos) frente a los 5.273 del año anterior, unas cifras que en gran medida se deben a los movimientos antivacunas que imperan en algunos países europeos.
El bebé contagiado no estaba vacunado
Según informa el diario Redacción Médica, el bebé de 20 meses contagiado en Vizcaya (País Vasco) debía haber recibido la primera dosis de la vacuna al cumplir los 12 meses, de acuerdo al calendario oficial de vacunación del Gobierno Vasco.
Sin embargo, el pequeño no había sido vacunado y por ello ha acabado contagiándose de esta enfermedad, que las autoridades relacionan con un brote ocurrido en Navarra.
Al tratarse de una enfermedad altamente contagiosa, se han llevado a cabo medidas de aislamiento y se ha seguido un estricto protocolo con aquellas personas que han estado en contacto con el niño, para evitar que el sarampión pueda seguir propagándose.
El Departamento de Salud del Gobierno Vasco insiste, desde su web, en la importancia de proteger a los niños de esta enfermedad cumpliendo con las pautas marcadas en los calendarios oficiales de vacunación. En el caso de esta Comunidad Autónoma, la primera dosis de la vacuna triple vírica se administra a los 12 meses y la segunda dosis a los 4 años de edad.
Una enfermedad altamente contagiosa
La OMS advierte de que una persona infectada por sarampión puede contagiar hasta 100 personas de su entorno, y es que esta enfermedad vírica se propaga con mucha facilidad y rapidez a través de las secreciones de la nariz y la boca. Basta un estornudo o una tos para que las partículas se diseminen por el aire y entren en contacto con otra persona.
Los pediatras y las autoridades sanitarias recuerdan que la única medida eficaz de evitar el contagio por sarampión es vacunando a los niños, haciéndolo a su debido tiempo y reforzando la dosis cuando corresponde.
La vacuna del sarampión forma parte de la vacuna triple vírica, junto a la rubéola y la parotiditis, y según el calendario oficial de este año de la AEP, debe administrarse una primera dosis entre los 12 y los 15 meses y una segunda dosis de recuerdo entre los dos y los cuatro años.
Desde el año 2012 hasta este brote, no se había detectado ningún caso de sarampión en el País Vasco, y el gobierno local habla de una cobertura vacunal en dicho territorio del 96,05 por ciento para la primera dosis, y del 94,7 por ciento para la segunda, cumpliendo con las indicaciones recomendadas por la OMS.
Lo cierto es que en nuestro país la cobertura vacunal es especialmente alta, y esto llevó a la OMS a otorgar a España el pasado año la acreditación de país libre del sarampión, a pesar de que a veces se dan algunos brotes esporádicos como este que os estamos comentando, o el de Barcelona ocurrido hace un par de meses y originado a partir de una persona que había viajado a Reino Unido.
Una enfermedad potencialmente grave o incluso mortal
Los síntomas del sarampión empiezan 10 ó 12 días después de haber estado expuesto al virus, y se manifiestan con fiebre alta, tos, conjuntivitis y granos rojos por todo el cuerpo que suelen aparecen a los 14 días de la exposición y durar casi una semana.
En algunos casos pueden producirse complicaciones que derivarían en otitis, neumonía o encefalitis. Estas complicaciones pueden afectar gravemente a algunas personas o incluso provocar la muerte, siendo los colectivos más vulnerables los bebés que aún no han sido vacunados, los adultos, las embarazadas y las personas inmunodeprimidas.
Fotos iStock
Vía Redaccion Médica
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