Conocemos que hay familias en los que al menos uno de los progenitores (si no los dos), tienen jornadas laborales muy amplias, horarios rotativos, etc., generalmente el trabajo es el que impide a los padres pasar más tiempo con sus hijos y dedicarles toda la atención que precisan. Muchos padres llegan a casa a las diez de la noche, los niños llevan rato durmiendo, en estos casos ni los cinco minutos de conversación son posibles. ¿Te encuentras en una situación similar? Los niños lo necesitan, conversar, preguntar, escuchar y jugar con sus papás, pero se habitúan a la ausencia del progenitor y lo sustituyen con entretenimientos que no les proporcionan la educación necesaria, después vienen los problemas de comunicación, de depresión, de fracaso escolar…
Este es un tema muy complicado que en cada hogar puede tener una solución distinta, pero es un tema que se va a afrontar en el Congreso Nacional de la Sociedad de Pediatría Social entre otros, como los relacionados con el maltrato infantil, los abusos sexuales a menores o los menores inmigrantes.
Vía | Mallorca Diario Foto | Gnmparents