Si tu bebé se despierta por las noches, las razones pueden ser varias, entre otras, que tenga hambre, esta es una razón que mueve a todos los bebés y es que a menudo, en la toma nocturna no se han saciado y por tanto se despiertan reclamando un poco más. La solución es bien fácil, ofrecerle un poco más de leche bastará para que se relaje y vuelva a dormir.
El calor también puede ser una de las causas que le despiertan, nuestra preocupación para que no coja frío hace que a menudo le tapemos demasiado, la solución es que tengas un termostato en la habitación para así confirmar la temperatura y no abrigarle en exceso. Evidentemente, cuando el pañal está empapado es una molestia para el bebé, esta incomodidad produce su despertar y más si el pañal no es especial para la noche. Otra razón puede ser que esté resfriado y le cueste respirar en este caso, el suero fisiológico puede ser mano de santo, además, un vaporizador le ayudará a respirar mucho mejor y así conciliar el sueño.
También es posible que un ruido perturbe el descanso del bebé, ya sea el ladrido de un perro, el trueno de una tormenta, la televisión, etc. Si tu bebé está en la fase de sueño ligero, es muy probable que se despierte, por esta razón, que un bebé se familiarice con los ruidos es beneficioso, es decir, hay padres que cuando el bebé duerme procuran no hacer nada de ruido y esto no es bueno si queremos que se habitue a los ruidos cotidianos.
Razones existen aún muchas más para que el pequeño se despierte, pero una cosa si es verdad, el contacto que tu bebé tenga contigo es un remedio casi infalible para su tranquilidad.
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