Con demasiada frecuencia se detecta que la dieta de los niños no incorpora suficientes vegetales y estos son importantísimos para su desarrollo y su salud a lo largo de su vida. Las vitaminas y la fibra, además de los minerales y también los hidratos que contienen son indispensables para su correcto desarrollo. Os vamos a ofrecer algunos consejos para incorporar más vegetales a la dieta infantil.
En cada una de las comidas del día deberían incluirse vegetales y os vamos a proponer algunas ideas para hacerlo de forma sencilla y sabrosa.
En el desayuno
Si nuestros hijos suelen desayunar un tazón de cereales industriales una manera de mejorar la calidad de su ingesta sería mezclar con ellos un poco de muesli o de cereales en copos integrales, unos trozos de su fruta favorita de temporada y unas nueces o almendras picadas. Convertiremos, aumentando poco a poco la cantidad, un desayuno poco saludable en uno muy sano y lleno de nutrientes.
Para acompañar el desayuno podemos preparar, además, un vaso de zumo natural de naranja o de cualquier otra fruta fresca que podemos hacer con la liquadora, un exprimidor manual especial o, si el niño lo acepta, con la batidora y un poco de agua o leche, para que tenga más fibra. Lo ideal sería ir variando.
En la comida y la cena
Es importante acostumbrar a poner una ensalada en la mesa a diario, y, aunque le pongamos queso, atún o huevo para darle más sabor, la ensalada debe incluir la mayor cantidad y variedad de hojas (escarola, lechuga, col, espinacas si el niño ya puede tomarlas, berros, canónigos o lombarda). Además le podemos poner zanahoria cortadita, rábanos, tomates y pepinos.
Las posibilidades son muy variadas y el que siempre aparezca en la mesa una rica ensalada desde que son pequeños les ayudará a acostumbrarse a ella.
Además, si a nuestros hijos les gustan los macarrones, la pizza o la lasagna es importante evitar los precocinados y, hagamos o no la masa en casa, usar verduras frescas para preparar las salsas.
Además, podemos ofrecerles estos mismos platos hechos solamente con verduras: tomate, calabacín, champiñones, pimiento rojo y verde, aceitunas, berenjenas. Todo tiene cabida en estos platos y, si el niño rechaza los trozos, podemos hacer un sofrito que lleve la mayor variedad posible.
Otra posibilidad son los gratinados de verdura, que quedan muy ricos con brócoli y coliflor. La salsa y el queso rallado harán que les sepa más suave y, los eliminemos o no, les acostrumbrarán a estos sabores.
Además podemos preparar tortillas con cebolla, espinacas o alcachofas añadidas a la patata, rebozados de verduras como el brócoli y la coliflor, y arroces vegetales con todas las verduras que queramos muy picaditas.
También podemos ofrecerles las verduras rehogadas con un ajito y jamón. Quedán deliciosos los guisantes, las espinacas y las judias verdes.
Las verduras en la parrilla, asadas, si es posible mientras comemos, es una forma divertida de introducirlas. Quedan deliciosas las setas, los champiñones, las berenjenas, calabacines y cebollas o cebolletas. Para que resulten más apetitosas podemos combinarlas con la carne hecha en la misma plancha y ponerles salsas variadas. Existen planchas que se pueden poner en la misma mesa y que asan los alimentos a medida que comemos. A los niños les encantan, pero, por supuesto, hay que extremar las precauciones y nunca dejarlos sin vigilancia ni un solo momento.
Meriendas y tentempiés
Si, de improviso, empezamos a incorporar vegetales al bocadillo de los niños o les damos fruta como único postre o merienda, puede que al principio se resistan. La clave es incorporarlos desde sus primeras comidas, para que no les extrañe luego el nuevo sabor.
Algunas soluciones que dan buen resultado son los bocadillos con tomate, frotado o en rodajas, las rodajas finitas de pepino y la lechuga, que le aportarán frescor y energía.
También, una forma deliciosa de ofrecerles un temtempié son los palitos de verdura (zanahoria, pepino, pimiento) para que remojen en una salsa de hummus o los palitos de fruta variada para remojar en su yogur favorito.
Estos son algunos consejos para lograr que en cada comida los niños se acostumbren a comer frutas y vegetales frescos, y espero que os sirvan para mejorar la dieta de vuestros hijos.
En Bebés y más | Casi la mitad de los niños comen menos de tres piezas al día de frutas y verduras, Cinco raciones de frutas y verduras al día, ¿llegamos?