La educación está presente en todas nuestras acciones, sentimientos y actitudes, y se adquiere de manera más o menos reglada a lo largo de nuestra vida. La transmisión de conocimientos, valores, costumbres y formas de actuar para la formación de las personas adquiere relevancia en las familias y en las escuelas.
El movimiento de Educación para Todos es un compromiso mundial de dar educación básica de calidad a todos los niños, jóvenes y adultos, algo que en la actualidad está lejos de conseguirse.
Esta iniciativa se puso en marcha en la Conferencia Mundial de Educación para Todos celebrada en 1990, bajo los auspicios de la UNESCO, el PNUD, el FNUAP, UNICEF y el Banco Mundial. Los participantes respaldaron una visión ampliada del aprendizaje y acordaron universalizar a la educación primaria y reducir masivamente el analfabetismo.
Con el paso de los años, muchos países estaban aún lejos de alcanzar ese objetivo y la comunidad internacional ratificó su compromiso de lograr la Educación para Todos en 2015.
Los seis objetivos del movimiento "Educación para todos" son los siguientes:
Extender y mejorar la protección y educación integrales de la primera infancia, especialmente para los niños más vulnerables y desfavorecidos.
Velar por que antes del año 2015 todos los niños, y sobre todo las niñas y los niños que se encuentran en situaciones difíciles, tengan acceso a una enseñanza primaria gratuita y obligatoria de buena calidad y la terminen.
Velar por que las necesidades de aprendizaje de todos los jóvenes y adultos se satisfagan mediante un acceso equitativo a un aprendizaje adecuado y a programas de preparación para la vida activa.
Aumentar de aquí al año 2015 el número de adultos alfabetizados en un 50%, en particular tratándose de mujeres, y facilitar a todos los adultos un acceso equitativo a la educación básica y la educación permanente.
Suprimir las disparidades entre los géneros en la enseñanza primaria y secundaria de aquí al año 2005 y lograr antes del año 2015 la igualdad entre los géneros en relación con la educación, en particular garantizando a las jóvenes un acceso pleno y equitativo a una educación básica de buena calidad, así como un buen rendimiento. Precisamente en sus últimos informes la UNESCO da a conocer que dos de cada tres países no ofrecen las mismas posibilidades de educación a niños y niñas.
Mejorar todos los aspectos cualitativos de la educación, garantizando los parámetros más elevados, para conseguir resultados de aprendizaje reconocidos y mensurables, especialmente en lectura, escritura, aritmética y competencias prácticas.
En unos contextos en los que la educación es prácticamente universal, estos objetivos parecen ampliamente superados. Pero la realidad en buena parte del mundo es bien distinta, y dos de los Objetivos del Milenio están referidos a la educación.
Por ello creemos que el movimiento "Educación para todos" se plantea metas indispensables para el desarrollo y el crecimiento de personas competentes y aptas para mejorar la salud, los medios de vida y fomentar las prácticas medioambientales seguras, entre otras cuestiones.
Vía | UNESCO Foto | Noel Feans en Flickr-CC En Bebés y más | Una escuela en la caverna, Hay otras escuelas infantiles, Sobre la escolarización infantil