Los beneficios de practicar yoga durante el embarazo son numerosos, tal y como hemos resaltado varias veces en Bebés y Más. Pero tampoco son los mismos para todas las mujeres, ya que “se trata de un camino de conocimiento personal, un camino que cada una tiene que recorrer, desarrollando de forma progresiva sus capacidades”.
Así lo asegura la matrona, enfermera y experta en Hatha Yoga, Isabel Coca en su último libro sobre el tema, 'Yoga y gestación'.
Hemos hablado con la autora, con 40 años de experiencia acompañando a mujeres durante el embarazo y el parto, para conocer de primera mano el espíritu de esta práctica, teniendo en cuenta las necesidades cambiantes de la gestación. Con ella aprendemos a conocer los cambios que se producen en un cuerpo gestante, y a buscar las compensaciones, la armonía y el bienestar también para ayudar en el parto y a recuperarse en el postparto.
Asanas y pranayanas durante el embarazo
La práctica del yoga ha superado el paso de miles de años y siguen vigentes sus beneficios. Es un camino que cada persona ha de descubrir, ya que solo con la práctica descubrirá sus beneficios.
A través de las diferentes posturas del yoga (llamadas asanas) y atendiendo a las necesidades concretas de cada persona, la mujer va descubriendo su cuerpo en esta nueva etapa de su vida.
“Las posturas realizadas desde la prudencia aportan elasticidad, fuerza y ayudan a conocer que necesita el cuerpo en cada momento, para ir avanzando. Cada gestante elige el grado de intensidad de sus movimientos, adaptados a la etapa en la que se encuentra. No todo sirve siempre y para todo el mundo”.
Así habla Isabel Coca de los beneficios que puede aportar el yoga a al embarazada. Esta enfermera y matrona ha dedicado su vida profesional a la preparación del parto y el postparto.
Formada en Hatha Yoga, desde 1984 introdujo la práctica del yoga en la preparación al parto, en aspectos como el parto sin violencia o el parto en el domicilio. Su experiencia en la dirección de grupos de educación sanitaria le ha permitido acompañar a mujeres y sus parejas en el camino de la maternidad y la paternidad.
"Mi profesión de comadrona me ha vinculado a los momentos vitales de la vida de las mujeres. A lo largo de más de cuarenta años he podido acompañar a muchas mujeres en la preparación a la maternidad, en el momento del parto y el nacimiento. Un privilegio que me ha permitido observar y aprender de las necesidades de cada mujer en los diferentes procesos y comprender que cada mujer y cada gestación puede tener necesidades diferentes".
Por su dilatada experiencia asegura también que con los pranayana (técnicas respiratorias), se trabaja la respiración, como herramienta natural para evitar la distracción de la mente: "es el puente que una la vida con la conciencia, el cuerpo con los pensamientos (mente). La futura mamá aprenderá a concentrarse a buscar el espacio para meditar y estar en comunión con su cuerpo y su bebé".
"Ayuda a conectar con el cuerpo durante el parto"
Explica la experta, que el yoga no te garantiza que tu parto sea más fácil, ni que no sientas el dolor que puedan producir las contracciones: “la práctica del yoga aporta el conocimiento de tus recursos, de tu fuerza mental, desarrollas la capacidad de comprensión de tu cuerpo y del proceso del parto”.
“El control y conexión de la respiración y de la mente ayudan a enfrentarse al parto desde la conciencia de cuales son todos tus propios recursos”.
Pero aún así, la incorporación de la cultura y disciplina del yoga y su práctica en Occidente, todavía no está suficientemente extendida y menos aún durante la gestación. Explica Isabel que "suelen recurrir a esta práctica durante el embarazo, las mujeres que ya están familiarizadas con el yoga desde antes".
Pero para el resto, no está tan accesible, señala la experta, en parte por la dificultad de acceder a su práctica de manera vinculada al control sanitario de la gestación. Para cambiarlo, aboga por la necesidad de “facilitar el conocimiento y la práctica de yoga desde el propio centro de salud, ya que hay muy pocos que lo ofrecen como parte de la preparación al parto y a la maternidad”.
De hecho, declara que todavía hay muy pocas matronas que se hayan formado en esta disciplina.
“Hay buenos profesores/as de yoga pero no tantos que conozcan la especificidad de la gestación, sus posibles patologías asociadas así como sus contraindicaciones a determinadas prácticas. Ello puede generar una cierta desconfianza en las embarazadas, siendo lo más práctico y lo más sencillo acudir al propio centro donde te ofrecen la preparación al parto”.
Ella misma cuenta que decidió formarse como matrona e incorporar el yoga en la preparación al parto, tras su experiencia personal en su primer parto:
“Profundicé en las ideas de Fréderick Leboyer y Michel Odent para ver otra forma de traer niños al mundo, sobre cómo atender los nacimientos y, paralelamente, empecé a formarme en Hatha Yoga. Afortunadamente, mi segundo parto me dio las herramientas para aplicar el yoga en los cursos de preparación al parto”.
"Hay que superar el miedo a lo desconocido"
Esta matrona y enfermera nos explica que el yoga puede ayudar a combatir los miedos más comunes o frecuentes durante la gestación y el parto.
Durante el embarazo, los temores guardan una relación con la salud y el desarrollo del feto. Estos miedos aumentan si la futura madre ha sufrido abortos anteriores o si ha tardado mucho en lograr el embarazo, con repetidas Fecundaciones in Vitro.
Es lo que asegura esta matrona, que señala también que los miedos en el momento del parto suelen referirse en general al dolor, a la capacidad de soportarlo, miedo a una experiencia desconocida en relación al cuerpo, miedo a que algo no salga bien, a que el bebé no sufra. Suelen ser miedos bastante expresados en general por todas las mujeres cuando se enfrentan a su primer parto.
Tras ser madre, la mujer suele sentir miedo a la responsabilidad a la maternidad, a la pérdida de libertad, a los cambios que se producirán con su pareja, en su entorno, familiar, social, laboral, económico.
Mejoras observadas cuando se práctica yoga
Superado el primer trimestre la gestante empieza a sentirse mejor, su cuerpo cambia, se hace muy evidente su embarazo. Una vez olvidadas las molestias gástricas, las gestantes que incorporan la práctica del yoga en su gestación, suelen tener menos molestias motoras y sobre todo mejoran la estática postural, el equilibrio, toman conciencia de su cuerpo y ello las ayuda a reconocer sus necesidades y buscar posturas compensatorias.
Así lo asegura Isabel Coca. Explica que "con la observación de la respiración aprenden a reconocer y controlar los ritmos así como a vincular su control asociado a su mente".
"Se aprende a integrar los cambios y te ayuda a reflexionar y desarrollar emociones y capacidades para hacerte más fuerte delante de los nuevos retos. Observar los efectos de una mente calmada les ayuda a progresar en la relajación tan necesaria en un momento tan intenso como es el parto".
Asegura la experta en yoga que "te enseña a respetarte y respetar a los otros. A cuidar tu cuerpo evitando excesos, a encontrar la armonía del cuerpo y de la mente".
La práctica de yoga requiere querer conocerte mejor, conocer tus capacidades y debilidades. “Las mujeres que se han preparado para el parto/nacimiento con la disciplina del yoga, se han enfrentado con más serenidad al proceso del parto y al dolor, sus partos han requerido menos uso de analgesia y anestesia epidural”.
Cambio positivo en el trato a la embarazada
La incorporación de las matronas en todos los procesos desde la prevención y el cuidado en la salud sexual y reproductiva de las mujeres, ha contribuido sin lugar a dudas a una mejora en la asistencia a las mujeres.
Así de contundente se muestra Isabel Coca, que asegura que en 40 años se han hecho grandes cambios para mejorar el trato en el embarazo y el parto, ese momento tan importante en la vida de las personas, aunque “eso no significa que haya que bajar la guardia, todavía queda camino por recorrer”.
Añade la experta matrona que "puede implicar el uso de anestesia epidural, si es lo que ella la necesita para disfrutar del momento del nacimiento de su bebé".
Aunque asegura que aún quedan cosas por lograr:
"Creo que todavía hemos de progresar en la conciencia al respeto del cuerpo de la mujer, tanto desde la praxis de los profesionales que las atienden, incorporando, quien aún no lo hace, el pedir permiso o autorización a la exploración ginecológica, o hacer exploraciones vaginales innecesarias durante el embarazo y el parto, ser cuidadosos con el trato, que las propias mujeres conozcan mejor sus derechos, y acompañarlas y consensuar las decisiones, dejando espacio para aclarar sus dudas”.
Por suerte, explica la autora de 'Yoga y Gestación', "en la mayoría de los hospitales públicos, gracias al esfuerzo de las matronas, los partos son respetados, con una disminución de partos medicalizados, y existe un plan previo para conocer los deseos de la mujer durante el alumbramiento".
Y aboga por la participación de la pareja en todo el proceso, ya que a su juicio ayuda psicológicamente a la mujer, pero también hace crecer como persona al futuro padre.
"Es una aliada también en el postparto"
Las mujeres que practican yoga en su embarazo siguen haciéndolo después de su parto, aprovechando los beneficios que tiene para su recuperación.
Así lo señala la matrona, que añade que los esfínteres del suelo pélvico están sometidos durante la gestación a cambios debidos al aumento del útero, su peso y a la elongación de las fibras musculares por los cambios hormonales y el nacimiento.
"Es importante reconocer esta parte del cuerpo y saber en qué condiciones inicias el embarazo. Algunas mujeres ya llegan al embarazo con un suelo pélvico muy laxo y ello les puede producir pequeñas pérdidas de orina".
"Conocer e identificar los músculos del suelo pélvico ayudará a poder trabajarlos y, al mismo tiempo, a identificar el canal del parto", explica Isabel. Ahí, practicar yoga ayuda y mucho.
Y asegura que, para llegar ahí bien, el yoga puede ser un gran aliado:
“Con mi libro pretendo acercar el yoga a las gestantes desde los principios básicos para su práctica. Es una herramienta que explica paso a paso qué puedes ir haciendo para sentirte bien con el yoga”.
Pero también puede ser muy útil para las que ya son madres, para ayudarles a mejorar su estado y su experiencia vital.
'Yoga y gestación', está editado por Editorial Kairós en castellano y por Publicacions de l’Abadia de Montserrat, en catalán.
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Yoga y gestación (Biblioteca de la salud)
Ioga I Gestació: 368 (Vària)