Cada vez son más los países que se unen a la iniciativa de prohibir los teléfonos móviles en sus centros educativos. Tras las decisiones tomadas por Francia, Holanda, Finlandia, Suecia o Italia, ahora le llega el turno a Reino Unido.
La ministra de Educación británica, Gillian Keegan, ha anunciado que los teléfonos móviles estarán prohibidos entre los estudiantes durante toda la jornada escolar, incluyendo los recreos. El objetivo es abordar la distracción de los alumnos en las aulas, mejorar el aprendizaje y proteger frente al ciberacoso. Aún faltan detalles por definir en torno a esta medida; entre ellos, la fecha de entrada en vigor.
Francia, país pionero en prohibir los móviles en los colegios. Francia fue el primer país en prohibir por ley el uso de los teléfonos móviles en las escuelas, en el año 2018. La prohibición afecta a los menores de 15 años, que no pueden usar móviles ni en los colegios, ni en los recreos, excursiones y extraescolares.
Holanda, ni móviles ni relojes inteligentes en las aulas. A partir del 1 de enero de 2024, los móviles, tabletas y relojes inteligentes quedarán prohibidos en las escuelas de Secundaria y Primaria Holanda porque "distraen y hace que los alumnos rindan peor". No obstante, se deja flexibilidad para que cada centro educativo establezca sus propias normas.
Suecia y Finlandia no quieren pantallas en clase. Con el objetivo de mejorar los resultados de los exámenes, el Gobierno finlandés anunció hace unos meses la prohibición de móviles y tabletas en las aulas. Recientemente, Suecia ha anunciado que va a seguir los mismos pasos y aparca las pantallas para volver a los libros.
Irlanda prohíbe los móviles para salvaguardar la salud mental de los niños. La comarca irlandesa de Greystones, llamada 'El jardín de Irlanda', es un territorio libre de móviles para niños. Los padres del pueblo han acordado prohibir los teléfonos a los menores de 12 años con el objetivo de prolongar la infancia al disminuir la ansiedad y la exposición a contenidos para adultos que a menudo provoca el uso de teléfonos inteligentes.
Italia permite el uso de móviles a criterio del profesor. El año pasado, el ministro de Educación italiano, Giuseppe Valditara, anunciaba que el uso de los teléfonos móviles en los colegios quedaba prohibido, por considerarlo un elemento de distracción y una falta de respeto a los profesores. Pero hay excepciones, pues los alumnos podrán seguir utilizando móviles y tabletas con autorización del profesor para fines educativos.
Alemania, de la prohibición absoluta a medidas flexibles. En Alemania no existe una prohibición estatal del uso de móviles en los colegios. Sin embargo, la región de Baviera realizó un experimento en varias escuelas de su zona en la que el móvil quedaba prohibido. Llegaron a la conclusión de que un uso moderado en las clases podía ser útil para el desarrollo de las mismas, por lo que lo deja a criterio de cada escuela. En educación Primaria, la prohibición sigue siendo absoluta.
China, móviles prohibidos en las aulas pero pueden llevarse al colegio. En las escuelas de Primaria y Secundaria de China, los móviles están prohibidos en las aulas, pero los alumnos que necesiten pagar con el móvil ciertos servicios pueden llevar sus dispositivos al colegio (más información, aquí).
España, a criterio de las comunidades. En España no existe una normativa estatal, y solo hay tres comunidades autónomas que tienen una regulación al respecto. En 2014, Castilla la Mancha fue la comunidad pionera en prohibir el uso de teléfonos móviles y otros dispositivos electrónicos en las aulas. Le siguió en 2015 Galicia, y en 2020 la Comunidad de Madrid. El resto de comunidades no cuentan con una legislación específica y el uso de los móviles depende de cada centro educativo.
Por qué cada vez más países están en contra del uso de móviles en los colegios
La creciente tendencia de prohibir o restringir el uso de teléfonos móviles en las escuelas se basa en una serie de razones fundamentales que reflejan la preocupación por el bienestar de los estudiantes y la calidad de la educación.
Para empezar, los expertos coinciden en afirmar que se trata de un potente elemento de distracción que reduce la capacidad de atención y concentración de los alumnos. Esto impacta de forma negativa en el rendimiento académico y aprendizaje de los niños, como ya lo han constatando numerosos estudios.
Pero además del plano académico, los teléfonos móviles en los colegios también pueden convertirse en una herramienta para el ciberacoso, provocar aislamiento social y problemas de salud mental, derivados de la exposición constante a las redes sociales y la presión por estar siempre conectados.
Recientemente, la Asociación Española de Pediatría y la Agencia Española de Protección de Datos han pedido un pacto de Estado para prohibir el uso de móviles en los colegios, así como una evaluación que determine si el uso de móviles y tablets en las aulas como instrumentos de enseñanza está incrementando la adicción de los niños a la tecnología.
No cabe duda de que se trata de un tema complejo y muy difícil de legislar, debido a la dificultad en su implementación y a las opiniones divididas. Y es que a pesar de las investigaciones que sugieren que la prohibición de teléfonos móviles beneficiaría el aprendizaje de los alumnos, también hay expertos que señalan que un uso moderado en un entorno seguro podría ser beneficioso.