Los ginecólogos canadienses no llevarán a cabo una cesárea de manera protocolaria en aquellos partos en que el bebé venga de nalgas, de acuerdo con las nuevas directrices para los profesionales de la salud de Canadá que se dieron a conocer la semana pasada.
Estas nuevas indicaciones vienen motivadas por una exhaustiva revisión de los estudios y la evidencia clínica acerca de los resultados de los partos vaginales en comparación con las cesáreas en este tipo de partos.
En las últimas semanas los bebés se giran en el útero para quedar en posición cabeza-abajo, sin embargo un 3-4% de los bebés no lo hacen y en el momento del parto presentan una posición "de nalgas", con los pies y las nalgas hacia abajo.
Hasta la fecha este tipo de presentación hacía que a la mayoría de madres se le practicara una cesárea. De hecho, era tal el porcentaje, que la cesárea se había convertido ya en una práctica casi automática. Según el Dr. Robert Gagnon, uno de los autores de las nuevas guías, "lo que hemos encontrado es que, en algunos casos, el nacimiento vaginal de nalgas es una opción segura, y los obstetras deberían ser capaces de ofrecer a las mujeres la posibilidad de parir de manera tradicional".
Al parecer, dado que en el momento en que un bebé venía de nalgas la recomendación era la de efectuar una cesárea un gran número de obstetras canadienses carecen de la formación adecuada para asistir un parto vaginal de nalgas.
Esta situación es extensiva a nuestro país, España, ya que los protocolos para los bebés que vienen de nalgas recomiendan la cesárea.
Recuerdo una charla de Inma Marcos (comadrona que asiste partos a domicilio e IBCLC de Alba Lactancia Materna) a la que acudí hace tres años en que pregunté qué haría ella en caso de encontrarse en un domicilio con un parto de nalgas. La respuesta fue simple: "Antes del parto habría intentado dar la vuelta al bebé, pues hay maniobras para ello. En caso de no conseguirlo asistiría el parto de la manera en que se asisten los partos que vienen de nalgas".
Me dejó dubitativo pues yo creía que un parto de nalgas era cesárea irremediablemente. Otra comadrona matizó las palabras de Inma afirmando: "El problema es que llevan tanto tiempo haciendo cesáreas en estos casos que los ginecólogos actuales no saben asistir este tipo de partos".
Esta situación de falta de formación lleva a la Sociedad de Obstetras y Ginecólogos de Canadá a formular el objetivo de formar a los obstetras para que puedan ofrecer a las mujeres la posibilidad de atender un parto vaginal de nalgas cuando sea posible.
A pesar de la noticia se advierte que muchos de los bebés que vienen de nalgas requerirán todavía una cesárea. Para elegir una de las dos opciones se realizará una ecografía detallada previa al parto para detectar en qué casos puede haber problemas con el cordón umbilical y sea precisa una cesárea y optar por el parto vaginal en el resto de situaciones.
Según he podido ver en las guías, han comprobado que el riesgo para el bebé es menor naciendo vía vaginal que mediante cesárea. Esperemos que esta situación se haga extensiva a otros países como el nuestro, donde la calidad de la atención mejora día a día.
Vía | SOGC (en inglés) Más información | Guías de la SOGC (en inglés) Imagen | Medline En Bebés y más | Un bebé que viene de nalgas, Dar vuelta al bebé que viene de nalgas, Nacer de nalgas podría ser hereditario