Este año se aprobó la ampliación del permiso de paternidad a cinco semanas, del que ya disfrutan los nuevos papás, y el Gobierno ha mostrado su intención de seguir ampliándolo progresivamente hasta llegar a equipararlo en 2021 con las 16 semanas del permiso de maternidad.
Pero son muchas las voces a las que no les parece una buena medida seguir ampliando el permiso de los padres en lugar de extender el de las madres, que por cierto, lleva unos treinta años inamovibles. Ayer se manifestaron en las redes bajo el hashtag #BajaDeMaternidadDignaYA para hacer ver que cuatro meses es muy poco y pedir extender la baja maternal unas semanas más (hay quienes hablan de 26 semanas).
Como mínimo seis meses
El reclamo va en el mismo sentido del de la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) que considera que el permiso de las madres debería prolongarse hasta, al menos, los seis meses para poder cumplir con los seis meses de lactancia materna exclusiva recomendados por la OMS.
Durante los primeros meses, los cuidados del bebé son claves. Es un derecho de los niños poder recibir durante el mayor tiempo posible los cuidados de parte de su madre, que es su principal figura de apego, y de quien se alimenta.
No significa que el padre no pueda dar estos cuidados, pero si es la madre quien da el pecho, deberían estar garantizados los seis meses de lactancia exclusiva que son tan beneficiosos para la salud y el desarrollo del bebé. Se debería ser coherente con las recomendaciones de los organismos sanitarios en cuanto al tiempo mínimo de lactancia.
Son muchas las mujeres que deciden abandonar la lactancia por lo difícil que resulta continuar con ella cuando vuelven al trabajo. Solo un 30 por ciento lo sigue haciendo, y las que continúan, hacen un gran esfuerzo extrayéndose leche en el trabajo, a pesar de las grandes dificultades de conciliación con las que se encuentran. Sin contar con la cantidad de horas que, los alimenten como los alimenten, tienen que estar alejadas de sus bebés.
Hoy en día la conciliación es muy pobre y las madres se ven obligadas a separase de sus hijos muy pronto y hacer malabares para conservar su trabajo, atender la casa, cuidar de los niños... Así no extraña que cada vez se tengan menos hijos.
Movimiento en las redes sociales
Bajo el hashtag #BajaDeMaternidadDignaYA Twitter se llenó ayer de mensajes apoyando la ampliación de la baja maternal como derecho para las madres y los bebés.
Más guarderías no es la solución
El Gobierno también ha anunciado que pretenden universalizar la enseñanza para niños de 0 a 3 años, para que no haya discriminación y todas las familias puedan acceder a una escuela infantil.
Pero no son más guarderías lo que se quiere, sino un permiso más amplio para que sean los padres quienes puedan cuidar de su bebé el mayor tiempo posible. La idea no es que los cuiden otras personas, sino que sumando ambos permisos, sean quienes mejor pueden cuidarlos, papá y mamá, quienes hagan esa tarea.
No somos iguales
La corresponsabilidad en la crianza de los hijos es fundamental, y es importante que el padre se involucre en el cuidado de los hijos en la misma medida que la madre. No se trata de que a ellos no se les amplíe el permiso. Al contrario, cuando más mejor para todos.
Pero en cuanto a fisiología hay una gran diferencia, ya que la madre es quien da a luz y amamanta a sus hijos, y quien atraviesa por el postparto, que no siempre es un camino de rosas. La mujer necesita al menos un año para recuperarse del parto.
Derecho a decidir
Otra cosa que considero que no tiene sentido es imponer la equiparación de los permisos para fomentar la corresponsabilidad, en lugar de dejar que cada pareja decida cómo organizarse.
Tanto papá como mamá son importantísimos para el bebé, y con permisos de maternidad y paternidad dignos y transferibles podrían organizarse para que queden cubiertos, como mínimo, esos primeros ocho meses del bebé al cuidado de ambos, que es a lo que se quiere llegar en 2021.