Cuando nuestros hijos comienzan a cambiar los dientes, la mayor preocupación de los padres es que éstos salgan bien, correctamente alineados y no presenten ningún otro problema que haga necesario el uso de ortodoncia.
Cualquier alteración en la dentición definitiva suele alarmarnos mucho, incluida la aparición de manchas en el diente. Si estas son de color violeta o grisáceo deberíamos pensar en que ha ocurrido una necrosis pulpar producida por un traumatismo, pero ¿y si son de color blanco? ¿Qué significan estas manchas y cómo se corrigen?
¿Por qué aparecen manchas blancas en el diente?
La Doctora Beatriz Iglesias Sánchez, miembro de la Sociedad Española de Ortodoncia y odontóloga y especialista en ortodoncia en la Clínica Pérez Varela, nos explica que las causas de la aparición de estas manchas en los dientes definitivos pueden ser varias y deberse a:
- Hipoplasia del esmalte: es un defecto del esmalte producido en la capa más externa del diente que hace que éste tenga menos cantidad de esmalte de lo normal. Una de las manifestaciones de este defecto es la aparición de manchas o puntos blancos en el diente definitivo.
"Esta alteración en el esmalte puede producirse por varios factores entre los que estaría un exceso de flúor (fluorosis), un golpe en el diente de leche que haya repercutido en el definitivo, fiebre alta durante la formación del diente definitivo, deficiencia nutricional o el consumo de algunos medicamentos" - explica la doctora Iglesias.
- La desclacificación del esmalte es otra de las causas que puede ocasionar la presencia de manchas blancas en el diente definitivo, y se suele producir cuando no se realiza un buen cepillado dental.
Por eso es importante enseñar a nuestros hijos cómo deben cepillarse correctamente los dientes y cuando hayan adquirido el hábito y sepan hacerlo solitos, supervisarles para asegurarnos de que lo están haciendo correctamente.
La importancia del flúor en su justa medida
La Doctora Iglesias nos habla del exceso de flúor (fluorosis) como una de las causas de la aparición de manchas en el esmalte del diente. Y es que se ha demostrado que aunque el flúor es eficaz para la prevención de la caries, un uso excesivo durante el periodo de formación del diente (tanto en las pastas dentales como en los enjuagues) puede desembocar en este problema.
Por ello, el uso del flúor en niños pequeños tiene unas recomendaciones de seguridad que debemos seguir de acuerdo a su edad:
La Academia Europea de Odontología Pediátrica recomienda que entre los seis meses y los dos años, los niños se cepilles los dientes dos veces al día con una pasta de dientes con 500ppm de flúor y la cantidad similar a un guisante. A los dos años ya se puede usar una pasta con 1.000 ppm. de flúor.
Entre los cuatro y los seis años ocurre la calcificación y maduración de los dientes posteriores, y el riesgo de que se formen manchas en el esmalte es alto. Por tanto, debemos vigilar las cantidades de flúor utilizadas en esta etapa, que deberán estar entre 1.000 y 1.450 ppm, y una cantidad de pasta del tamaño de un guisante.
A partir de los seis años, la cantidad de pasta dental utilizada será entre uno y dos centímetros y una concentración de flúor de 1.450 ppm.
¿Cómo podemos eliminar las manchas blancas?
Una vez han aparecido las manchas, la odontóloga nos explica que es muy difícil eliminarlas o incluso reducirlas de manera natural, algo que se podría conseguir con tratamientos dentales estéticos.
En cualquier caso, la mejor solución siempre pasa por prevenir en la medida que podamos su aparición, siguiendo estos consejos:
Cuidar la alimentación de nuestros hijos para que sea equilibrada. De esta forma no sólo estaremos cuidando su salud en general, sino también la salud dental. Los expertos aseguran que los alimentos ricos en calcio y aquellos que son ricos en minerales son muy beneficiosos para los dientes.
Supervisar o ayudarles con su higiene dental diaria.
Cuidar especialmente la higiene bucodental del niño con brackets, ya que la acumulación de placa en los dientes puede dañar gravemente el esmalte provocando manchas blancas y caries.
Utilizar pastas dentífricas y colutorios adecuados a la edad del niño y con la concentración de flúor indicada para prevenir la aparición de caries.
Acudir regularmente al odontopediatra para que revise la salud de los dientes y detecte a tiempo cualquier problema que pueda surgir.
Si aún así, en algún momento detectas una o varias manchas blancas en el esmalte del diente de tu hijo, lo más recomendable es acudir al odontólogo para que haga una valoración y nos indique cómo proceder al respecto:
"Normalmente es muy difícil conseguir que este tipo de manchas se reduzcan y desaparezcan de manera natural. Se aconseja intensificar la higiene para evitar que, si las manchas blancas son fruto de una mala higiene, éstas no aumenten" - aconseja la doctora Iglesias.
Fotos iStock
Vía Wonder Smile
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