Los sondeos demuestran que las panzas de los niños y adolescentes aumentaron un 65 por ciento desde 1990, un aumento directamente proporcional a las tasas de obesidad.
Esto quiere decir que los niños estadounidenses de hoy en día corren mucho mayor riesgo de sufrir graves enfermedades cardíacas y diabetes.
Lo peligroso, más que el aumento de peso, es el aumento de grasa abdominal que rodea los órganos internos, lo que provoca enfermedades.
Según los expertos, el aumento más grande de obesidad abdominal se produjo en los niños de 2 a 5 años.
Dicen que la mejor forma de medir la grasa abdominal es midiendo la circunferencia de la cintura, cosa que no suele hacerse en los consultorios pediátricos y es más fiable que el índice de masa corporal que calcula el peso en relación a la altura.
La obesidad también está extendiéndose rápidamente por Europa, así que no hay tiempo que perder.
Vía | Reuters En Bebés y más | Sobrepeso y obesidad infantil En Bebés y más | Dormir menos de lo necesario puede provocar obesidad en niños según estudio