El Gobierno impulsó en 2021 una política para favorecer en la población hábitos de vida más saludables. Lo que hizo fue subir el IVA de las bebidas azucaradas y edulcoradas, que pasó del 10% al 21%.
Explicaron que esta medida iba en línea con "las recomendaciones de numerosos organismos internacionales que recomiendan a España limitar la aplicación de tipos reducidos en el IVA". Su objetivo: "combatir la obesidad infantil y enfermedades asociadas como la diabetes".
Ahora un estudio elaborado por investigadores en EsadeEcPol, Center for Economic Policy ha analizado el efecto del alza de este impuesto y ha puesto de manifiesto que la medida redujo de manera significativa el consumo medio del tercio de hogares con menor nivel económico.
Lo hizo en unos 11 litros por hogar al año. Pero no tuvo un efecto apreciable en el consumo de los hogares de nivel económico medio y alto. ¿Qué más sabemos?
Subir el IVA de las bebidas azucaradas: ¿qué impacto ha tenido?
La caída del consumo de bebidas azucaradas. Según el estudio, el impacto del impuesto fue aún mayor en los hogares de menor nivel económico
con hijos, donde la caída del consumo llegó a 25 litros por hogar al año.
Un impacto de la medida, pero solo para algunas familias. Los hogares de menor nivel económico son los que redujeron más el consumo de bebidas azucaradas, en comparación con los hogares de nivel económico medio y alto.
En un tercio de las familias de menor poder adquisitivo, el descenso medio fue de 10,8 litros por año, lo que equivale a una caída del consumo del 13%. Sin embargo, para el resto de los hogares no hubo un cambio significativo en sus hábitos de compra de este tipo de productos.
El consumo en familias con hijos de 5 a 16 años. Esta disminución de bebidas azucaradas se ha multiplicado por cuatro en los hogares de menor poder adquisitivo que además tienen hijos de 5 a 16 años. En estos hogares, la caída estimada del consumo llega a 25 litros menos por año.
Esto se traduce en lo siguiente: entre los hogares con niños y menos ingresos la caída sería de un 20% (25 litros), mientras que para los hogares pobres sin niños sería de un 7% (6,3 litros), aproximadamente.
Disminuyen también los snacks. Al mismo tiempo, dentro del tercio de hogares de menor nivel económico, la subida del IVA provocó un descenso de unos 5€/año por hogar (es decir, un 10,5% menos) en el gasto de snacks, productos que se suelen consumir con estas bebidas.
Falta investigar su efecto sobre la salud. Según los autores, la medida ha tenido efectos en el consumo y los precios de las bebidas, aunque se tendría que investigar si el impacto en la salud ha sido real.
Impacto en la obesidad. No está claro si el impacto de esta medida ha tenido a su vez repercusión en la obesidad infantil. Lo que sí sabemos es que el azúcar está muy ligado a la obesidad, sobre todo la infantil, y, por extensión, al gasto público.
En España, según datos de 2019 de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), las patologías relacionadas con la obesidad suponen un 10% de este gasto. Esta cifra sitúa a España un poco por encima del resto de países con ingresos altos.
Prevalencia de la obesidad infantil. El 23,3% de la población infantil en España tenía sobrepeso en 2019, y un 17,3%, obesidad, según datos del estudio de Alimentación, Actividad física, Desarrollo Infantil y Obesidad en España (ALADINO 2019) realizado por la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición.
Si nos vamos a cifras más actuales encontramos un informe de marzo del 2022, titulado 'Adiós a la dieta mediterránea: nutrición y hábitos saludables de la infancia en España', elaborado por Save the Children. El informe sitúa a España a la cabeza, junto a Chipre e Italia, en el ranking europeo de obesidad infantil.
Calculan que de media en la Unión Europea, aproximadamente 1 de cada 8 niños y niñas de entre 7 y 8 años sufre de obesidad, y, en concreto, en España es casi 1 de cada 5, es decir, el 18%.
Por su parte, Teresa Cenarro, vicepresidenta de la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPAP), reconoce que, "si bien estas dos patologías [sobrepeso y obesidad] se producen por muchas razones, desincentivar el consumo de azúcar con medidas como esta es un buen e importante comienzo".
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