El papel de los padres ha cambiado radicalmente en sólo una generación. Ahora los hombres quieren formar parte de la vida su hijo desde el momento el que se enteran de que van a ser papás y, por supuesto, esta forma de vivir la paternidad continúa durante la crianza.
Sin embargo, parece que una parte de la sociedad sigue considerando a los hombres como padres "de segunda" y tienen que escuchar comentarios no deseados cuando están solos con sus hijos. Una web británica los ha recopilado: ¿Estás de canguro? es solo uno de los comentarios irritantes que los padres tiene que oír cuando cuidan en solitario a sus peques.
Cambio de mentalidad
Estamos más acostumbrados a escuchar a las mujeres quejarse de los roles que la sociedad les impone como madres y no les falta razón. Pero, ¿qué pasa con los padres? La web británica ChannelMum.com ha realizado un estudio entre 2.000 de ellos y resulta que más de la mitad habían recibido comentarios que les habían molestado cuando estaban en la calle solos con sus hijos.
La fundadora de la web, Siobhan Freegard, comenta sobre los resultados de su encuesta:
"Casi todos los asuntos relacionados con la crianza de los hijos todavía se centran únicamente en la participación de la madre, por lo que no es de extrañar que los padres estén hartos. Los hombres modernos son más padres que nunca, por eso es frustrante para ellos cuando la gente se sorprende de que puedan cuidar a sus hijos".
¿Estás de canguro?
Entre los comentarios no deseados que reciben los papás participantes, les ponen de los nervios especialmente los que ponen en duda su capacidad como cuidadores. Aquí van las frases más frecuentes que han tenido que escuchar:
- Lo tienes bien entrenado (dando por hecho que el trabajo de "entrenamiento" lo ha hecho la madre).
- Lo estás haciendo mal, debería ser así.
¿Estás decepcionado de que tu bebé no haya sido niño?
¿Estás de niñera hoy?
Es bonito ver a un hombre cuidando a los niños.
Apuesto a que estás deseando que tu mujer vuelva.
¡Vaya, tu bebé es enorme!
Acostúmbrate a no volver a tener sexo ahora que los niños han llegado.
¿Quién ha planchado la ropa de los niños?
¿Tu mujer te preparó la ropa de los niños?
¡Siempre hay uno que llega tarde!
¡Vaya! (sorpresa) Eres bastante bueno cambiando pañales.
Mira, te las has arreglado para llegar a tiempo.
Eres un padre tan práctico...
Eres un blandengue.
¿Dónde está tu pareja?
Oh, te has acordado de prepararle la la bolsa para Educación Física (muy sorprendente también).
¿Es difícil trabajar a tiempo completo cuando tienes un bebé?
Tu bebé parece muy feliz contigo.
Debe ser difícil para ti levantarte temprano con los niños.
Dudas sobre su capacidad
Muchas mujeres se quejan de que, cuando son madres, en el trabajo parece que tienen que demostrar que son igual de válidas que antes de quedarse embarazadas. Pues parece que en caso de los hombres pasa algo parecido con la paternidad: se pone en duda su capacidad y de ahí los comentarios de sorpresa cuando hacen algo que a las mujeres se nos da por sabido.
Aunque una parte de la sociedad siga viéndolos así, el estudio revela que ellos tienen una visión más igualitaria respecto al reparto de la crianza:
"La mayoría de los padres británicos cree que su carga paterna se comparte al 50% con su pareja -y el resto lo considera una división de 70-30- y algo menos de la mitad está de acuerdo en que los hombres tienen una mala reputación cuando se trata de ser padres. De hecho, el 57 por ciento de los encuestados cree que la gente piensa que no son tan buenos padres como la madre de sus hijos".
Las más críticas, las mujeres
Esta encuesta también revela un dato sonrojante: la mayoría de estas frases irritantes vinieron de suegras, parejas u otras madres, por ese orden. O sea, mujeres.
En otras encuestas anteriores se se puso de relieve que, muchas veces, los hombres consideran que la madre ejerce demasiado control sobre la crianza y que les gustaría tener más participación en la toma de decisiones sobre los niños. Y esto tiene importantes consecuencias, ya que se ha visto que el exceso de críticas de la madre durante los primeros meses de vida del bebé afecta negativamente a la crianza.
Un papel crucial
Es difícil (sobre todo porque eso de que el reparto de tareas está al 50% habría que contrastarlo), pero ceder un poco el control y dejar a los padres espacio para ser padres a su manera tiene importantes beneficios para la familia. Hay estudios dicen que los bebés de padres que se involucran en la crianza aprenden más rápido, incluso los pediatras aconsejan que los padres pasen más tiempo con sus hijos porque su forma de tratarlos es diferente a la de las madres.
Parece que los papás también tienen que lidiar con el exceso de críticas de la sociedad hacia la crianza que hay hoy en día. Ojalá ningún padre tenga que escuchar más "¿estás de niñera? cuando le vean solo con su hijo.
Vía The Independent
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