Primas de riesgo, embargos, despidos, paro, recortes... Estamos cansados de escuchar en las noticias cada día hablar de la crisis, siempre asociada a elementos negativos. O casi. Porque la crisis está motivando que más mujeres amamanten a sus bebés.
No se trata de la razón más importante para optar por la lactancia materna, pero esta manera de alimentar al bebé ahorra dinero en las familias, en las empresas y en el Estado, lo que ha hecho que al menos muchas madres se inclinen a amamantar a sus bebés.
Los problemas económicos y el paro femenino derivados de la crisis se han convertido en aliados de la lactancia materna y cada vez son más las mujeres que optan por amamantar a sus bebés, bien por el elevado precio de la leche artificial o porque al estar desempleadas disponen de más tiempo, lo cual también ha alargado el periodo de amamantamiento.
Además, más mujeres se extraen la leche para almacenarla y poder darla a su bebé más tiempo, por si vuelven a trabajar. Todo ha hecho que en España se duplique el número de madres que amamanta a sus hijos durante seis meses como recomienda la Organización Mundial de la Salud.
Pero también se puede explicar por la labor de Asociaciones pro lactancia materna y campañas informativas que apoyan la decisión de alimentar al bebé de forma natural, o enseñan que la vuelta al trabajo y la lactancia materna no son incompatibles.
De todas formas, no es solo en España donde han aumentado las tasas de lactancia materna. En Estados Unidos también se ha visto incrementada sensiblemente en los últimos años. En un país que no ha sufrido tanto los estragos de la crisis se explica este aumento de las mamás que dan pecho a sus bebés por la mejor información y mayor concienciación de estas.
También tienen que ver con los programas de mejora introducidos en los hospitales (campañas, formación de profesionales...), una labor que también se hace en España y en otros países y que también tienen que ver en estos buenos datos nacionales. Por ello, ojalá sin crisis esta labor siguiera surtiendo efecto, y cada vez más familias se unieran a lo más sano para los pequeños sin tener que mirar el bolsillo.
En cualquier caso, la lactancia materna ahorra más de 600 euros al año, porque ese cálculo es de hace unos años, y conforme están los precios hoy día podríamos sumarle un par de cientos de euros más.
Una cantidad nada desdeñable para los bolsillos familiares. Si además le estamos dando lo mejor al bebé, ¿qué más podemos pedir? Bueno, sí, que remita esta crisis en todo lo demás...
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