Entre el tercer y quinto mes el bebé empieza a pronunciar algunas consonantes o vocales mínimas, a esta etapa los especialistas le denominan juego vocal. A partir del sexto mes hasta el noveno, el bebé ya empieza a formar cadenas silábicas reiteradas y de larga duración, a esta etapa se le llama balbuceo reduplicativo.
El balbuceo no reduplicativo es la siguiente etapa comprendida entre el noveno mes y hasta que aparecen las primeras palabras. En esta etapa comienza el contexto comunicativo, cadenas cortas de vocal-consonante, consonante vocal, etc.
Hasta ahora no se podían visualizar los cambios producidos en el cerebro del pequeño, pero esto ha cambiado logrando un importante avance científico. La noticia es la siguiente, la evolución que los niños experimentan desde el balbuceo hasta las palabras se puede ver a través de imágenes.
Un estudio que se ha realizado en Barcelona por investigadores catalanes, ha mostrado por primera vez en imágenes qué ocurre en el cerebro de un bebé cuando adquiere el vocabulario entre los 18 y 24 meses de edad. Las áreas del cerebro relacionadas con el lenguaje maduran y la mielina cubre estas áreas (zona blanca en la foto), entonces, automáticamente el niño pasa de realizar balbuceos a poder hablar.
Este descubrimiento posibilitará, según el neurólogo Jesús Pujol, ayudar a los niños que tengan problemas con el lenguaje, ya que gracias a estas imágenes se puede estudiar el tiempo en el que ocurren los cambios y hacer un seguimiento para determinar las causas del problema.