Una forma de castigar a los niños bastante habitual es el método del “tiempo fuera” en el que se lo retira a pensar a un rincón o sentado en una silla durante un tiempo determinado. Con este concepto ha sido creado el taburete con reloj de arena, el cual por cierto no me gusta nada.
El taburete es un reloj de arena de grandes dimensiones con fina arena blanca que tarda cinco minutos en pasar de un lado al otro, el tiempo que se supone que debe permanecer el niño castigado para reflexionar sobre lo que ha hecho.
La fórmula del “tiempo fuera” consiste en retirar al niño del contexto donde se ha llevado a cabo la conducta no aceptada. Muchos niños ni siquiera saben por qué están realmente allí apartados, lo que hace ver que el castigo es un método poco educativo, pues el efecto del castigo es momentáneo, pero no se ha modificado la conducta inapropiada.
Es por eso que, por más decorativo que sea, el taburete con reloj de arena, utilizado como método de castigo me parece bastante ofensivo, así como tampoco creo que utilizar rincones o sillas de castigo sirva para que los niños aprendan a modificar conductas. ¿A vosotros que os parece?
Vía | Compradicción
Más información | Like cool
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