Las primeras vacaciones de verano de tu bebé: qué tener en cuenta para que sean inolvidables
Nunca olvidaré mis primeras vacaciones como madre. Mi bebé tenía un mes de nacida y yo estaba deseando irme a disfrutar con ella de la playa, seguramente porque es un sitio que me recarga baterías y justamente eso era lo que necesitaba tras mi estreno como madre primeriza (con todo lo que eso conlleva). Aunque la situación cambia muchísimo comparándola a cómo te ibas de viaje sola o en pareja, os puedo asegurar que es posible disfrutarlo y lograr uno de los mejores recuerdos de tu vida.
Elige un destino en el que os sintáis cómodos
Si en mi caso nos hubiésemos ido a la montaña, estoy segura de que no lo habría disfrutado igual. Me encanta caminar por el paseo marítimo, desayunar viendo el mar y aunque en ese momento no pasé mucho tiempo en la playa, solo con poder pasear por allí me relajaba. Por eso en caso de las primeras vacaciones, cuando eres primerizo en eso de hacer maletas y lograr llevar el ritmo en un sitio distinto a casa, lo más recomendable es elegir un sitio en el que os mováis "como pez en el agua".
Prepara el desplazamiento
Este punto puede suponer el empezar las vacaciones con buen pie (o no). Por eso es importante tener en cuenta qué necesita el bebé (y nosotros) para que el desplazamiento sea lo más llevadero y cómodo posible, teniendo lo que necesitamos a mano sin caer en excesos.
Cierra temas antes de empezar las vacaciones
Si en condiciones normales para disfrutar realmente de las vacaciones necesitas desconectar del trabajo y de todos los asuntos pendientes que tengas, con un bebé es obligatorio. Enfócate en descansar, en seguir al fin ese famoso consejo de "duerme cuando él duerma" (yo nunca lo logré en el postparto por todo lo que había que hacer en casa), en disfrutar de su compañía sin pensar en nada más y en saborear esos días que nunca volverán.
No llenes la agenda de actividades
Antes de convertirme en madre era de ese tipo de personas que viajaba con un itinerario y no paraba durante todo el día. Sin embargo desde que mi primer bebé llegó, solo tengo en cuenta algunos puntos de interés de los sitios a los que vamos (y sinceramente, si no logro conocerlos todos, tampoco pasa nada). Creo que cuando viajas con un bebé por primera vez la prioridad debe ser descansar, que el bebé sienta esa "recarga de baterías" en sus padres y me repito: disfrutar al máximo de él.
Planifica los menús
En caso de que el bebé ya no tome pecho o biberón de forma exclusiva, revisa que en el sitio al que vais tenéis acceso a comida apta para él. En ese primer viaje en particular decidimos alquilar un piso con cocina, pero en otros que hicimos cuando ya estábamos introduciendo la comida, viajábamos con potitos hechos en casa y envasados al vacío que posteriormente guardábamos en la nevera de la habitación.
Prepara juguetes para disfrutarlos con tu bebé
Si el bebé ya se sienta, hay muchas opciones más allá del cubo y las palas. Aprovecha ese momento de pasar tiempo al aire libre (ya sea la polaya o la montaña), para que el bebé experimente con tierra (o arena), y agua sin preocuparte por que se manche o se moje, ya que es una de las mejores actividades para estimular su psicomotricidad.
Prepara el botiquín
Uno de los imprescindibles para irte de viaje tranquilamente es llevar contigo un botiquín debidamente preparado, la tarjeta sanitaria -la europea en caso de que vayáis a salir de España-, o un seguro de viaje dependiendo del destino. Por experiencia propia os aseguro de que la posibilidad de que se pongan malos estando de viaje es inversamente proporcional al tamaño del botiquín que llevéis.
Vete ligera de equipaje
Antes de convertirme en madre solia llevar una maleta llena de "porsiacasos". Al viajar por primera vez con mi bebé, justamente en esas vacaciones que he mencionado al principio, todos los "porsiacasos" pasaron a ser pensando en ella, y después de 6 años, trato de llevarme lo mínimo posible, porque la recursividad es una de las herramientas más útiles que tienes como madre. Hazte fácil la vida llevándote lo indispensable.
Disfruta de actividades al aire libre
En el día a día normal (y más ahora con la pandemia), hemos pasado mucho tiempo en casa, así que es un momento perfecto para disfrutar del aire libre y de hacer actividades que normalmente no tenemos en mente. También es vital tener en en cuenta que durante el verano hay que evitar estar fuera durante las horas centrales del día y que no se debe aplicar protección solar a los bebés menores de seis meses.
Coge el móvil lo mínimo posible
Con la pandemia se ha disparado el uso de móviles y tablets, así que seguramente tú también necesites una desconexión digital. De esta manera aprovecharás mejor el tiempo para descansar y disfrutar de tu bebé. Eso sí, no olvides hacer muchos vídeos, fotos y también pedir que te las hagan para no ser de esas madres que nunca salen en ellas.
Al regresar, haz un álbum con fotos impresas
Dentro de todas las cosas que hemos perdido con el pasar de los años, una de las que más nostalgia me da es esta. Soy de la vieja escuela y encuentro que un álbum de fotos con momentos tan especiales como este es un objeto entrañable y te genera una sensación distinta a ver las fotos en la pantalla de un móvil. Hay experiencias que merecen volver a las viejas costumbres y creo sinceramente que esta es una de ellas.