Hace solo unas semanas la top model Naomi Campell anunció por sorpresa que había sido madre con 50 años, sin especificar cómo lo había logrado.
Pero no es la única celebrity que tiene un hijo a edad avanzada: la cantante Janet Jackson, con 50, la actriz Cameron Díaz, cumplidos los 47 años o, más reciéntemente aquí en España, la actriz María Adánez, que ha sido madre por primera vez a los 44 años.
Y no solo las madres famosas retrasan su maternidad, sino que es una realidad cada día más palpable. Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), las mujeres españolas cada vez tardan más en ser madres: el primer hijo se retrasa más allá de los 31 años.
Esto lleva a que los bebés nacidos mediante técnicas de reproducción asistida ya suponen el 9% del total de nacimientos de nuestro país. Por eso, hemos querido hablar con un experto en fertilidad para que nos explique qué técnica de reproducción asistida es la más indicada para convertirse en madre a edad avanzada, la doctora Mónica Aura, directora médica de la clínica Ginefiv Barcelona.
Inseminación artificial, la técnica más sencilla
Según la experta en fertilidad, la técnica más sencilla dentro los tratamientos de reproducción asistida es la inseminación artificial, "indicada para personas menores de 38 años con problemas de infertilidad leves o para casos en los que haya problemas durante el coito, alteraciones del moco cervical, endometriosis leve o alteraciones en la ovulación o esterilidad de origen desconocido".
"También se utiliza en mujeres sin pareja o cuya pareja también es mujer. En estos casos se debe recurrir a un donante de semen".
La doctora explica en qué consiste:
"La fecundación tiene lugar dentro del sistema reproductor femenino. Para esto, se prepara previamente una muestra de semen de la pareja (o donante) en el laboratorio y se deposita en el útero de la paciente para incrementar las posibilidades de embarazo".
Y añade que esta técnica no estaría indicada en mujeres con baja reserva ovárica o mayores de 39 años, ni para los casos donde la calidad del semen no sea buena.
El tratamiento empieza tras una evaluación médica donde se estudian las posibles causas de infertilidad de los pacientes. Luego se procede a la estimulación ovárica mediante medicación hormonal, la selección y la capacitación de espermatozoides el día de la inseminación y se realiza el proceso de inseminación y se finaliza con una prueba de embarazo a los 15 días, aproximadamente.
Fecundación in vitro (FIV)
"En este método de reproducción asistida los ovocitos de la mujer son fecundados en un laboratorio con los espermatozoides (de una pareja o de un donante)".
Así explica en que consiste esta técnica la doctora Mónica Aura, añadiendo que se trata de "un tratamiento que permite un mejor estudio e información sobre la pareja y las causas de infertilidad, para así detectar cualquier alteración en la secuencia de formación y desarrollo embrionario".
Para que se entienda el procedimiento, señala que conlleva una punción ovárica en la que se extraen los ovocitos que luego son fecundados para obtener unos embriones que seguirán en cultivo en las incubadoras hasta el momento de la transferencia embrionaria.
Las posibilidades de lograr un embarazo son muy altas según la experta (de hasta un 95% tras tres ciclos), pero caen a medida que la mujer cumple años.
La ovodonación, la mejor opción para mayores de 40 años
Según la experta en fertilidad, es el mejor tratamiento para las mujeres que quieren ser madres, cumplidos los 40 años.
La doctora añade que el óvulo donado es fecundado por el semen de la pareja (o semen de donante) e implantado en el útero de la paciente. ¿Cómo?
Se le realiza un completo examen médico y analítico para descartar cualquier anomalía.
Se elegirán los óvulos de la donante más adecuada a la receptora.
Se trata a la mujer con el fin de preparar el endometrio para la transferencia embrionaria y aumentar las probabilidades de implantación.
Se realiza la fecundación in vitro con los óvulos de la donante y el semen de la pareja.
Se procede a la transferencia embrionaria introduciendo los preembriones en un catéter y colocándolo en el útero de la paciente receptora.
Los preembriones no transferidos se vitrifican por si la mujer los quiere utilizar en un futuro.
Según datos del Registro de la Sociedad Española de Fertilidad (SEF), su tasa de éxito ronda el 60% en el primer ciclo, el 80% en el segundo ciclo y el 90% en el tercer ciclo.
¿Cuándo consultar?
La directora de la clínica Ginefiv de Barcelona recomienda realizar un estudio de fertilidad si la mujer tiene menos de 35 años y no se queda embarazada después de un año teniendo relaciones sexuales sin protección, y tras seis meses si ya ha cumplido 36 años.
"Para cualquier mujer que quiera quedar embarazada, lo primero que se le debe recomendar es que preste mucha atención a su salud reproductiva y haga una valoración de su fertilidad por un especialista".
En cuanto a la edad máxima para buscar un embarazo por reproducción asistida, la doctora Mónica Aura señala que en España no hay una ley establecida que regule la edad límite para acceder a estas técnicas "pero hay un consenso desde las sociedades científicas que lo limita a los 50 años".
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