Un hospital es uno de esos lugares donde preferimos no estar, salvo que no nos quede más remedio y si hablamos de la planta infantil, entonces ni nosotros ni los especiales pacientes de esta planta desean siquiera pasar cinco minutos en ella. Pero hay veces que la vida nos juega malas pasadas y algunos de nuestros más preciados tesoros terminan pasando una temporada entre sus paredes.
Para ellos, los más pequeños, un hospital es un sitio hostil, a su mala situación física se le suma que no es un lugar que conozcan, está lleno de extraños que les tocan, les mueven y les hacen un montón de preguntas y pruebas por lo general poco o nada agradables. Pero para cualquiera que haya sido paciente, acompañante, padre o personal de hospital sabe que hay "algo" que ayuda a las medicinas a hacer mejor su trabajo y es que ese entorno hostil se haga más amigable, que quienes nos cuidan sepan cómo tratarnos para hacernos un poco más cómoda nuestra enfermedad, algo que con los niños es primordial pues muchas veces no entienden bien el por qué están ahí. Por eso un grupo de artistas transformó la planta infantil de un hospital con un resultado espectacular.
Varios artistas pertenecientes a la organización británica Vital Arts, se han unido para transformar el interior del London Royal Children’s Hospital dando como resultado un mundo completamente diferente al que nos encontraríamos al llegar a un centro de este tipo.
Os dejo con una serie de fotografías de su interior que espero sean de vuestro agrado.
Vía | bored panda