Los padres de niños que hayan consumido botes del lote 236 de la leche Blemil Plus 1 y estén afectados de salmonelosis creo que no están recibiendo un mensaje claro de las autoridades sobre como tienen que actuar.
No es de extrañar que nos encontremos ya en la prensa con la noticia de que los padres de un bebé afectado por salmonelosis han denunciado a los laboratorios Ordesa, productores del lote sospechoso de Blemil Plus 1.
Sin embargo, la empresa asegura que no hay relación entre el brote y el lote retirado, añadiendo que hay análisis de laboratorios externos que lo certifican.
Antecedentes del caso
Hasta ahora los mensajes de las autoridades públicas son vergonzosamente confusos y tibios. Primero, cuando la empresa detectó un mal sellado del lote 236, se limitaron a indicar que se llevara a las farmacias para devolverlo y que no se consumiera. Ni una instrucción de acudir a una revisión o que se fuera a analizar el contenido de los botes.
No había, aparentemente, la más mínima preocupación sobre una posible contaminación del producto ni, por lo que he podido averiguar, análisis de todas las unidades recogidas para verificar su estado, ni un control riguroso de la total retirada del producto y su destrucción posterior a la analítica. Nada de nada. Tranquilidad.
Cuando se ha declarado el brote de salmonelosis en lactantes, las instrucciones siguen siendo las mismas, que no se use y se lleve a la farmacia para que se retire.
Es más, siguen sin hacerse públicos los resultados de análisis sobre los botes recogidos ni por la empresa ni por las familias afectadas, pero parece que hay serios indicios que apuntan a que esta leche es la causa del problema, pues se desprende, aunque no se afirme, que los niños enfermos la habían consumido. Pero no se sabe seguro, de forma confirmada todavía. Las autoridades infunden preocupación y la empresa llama a la tranquilidad. ¿Qué debemos creer?
Lo que no entiendo es la razón por la que no se sabe nada, ni de los botes recogidos antes de declararse el brote, ni del tiempo que se ha tardado en relacionarlos, ni de lo que se sabe con seguridad. La sensación de preocupación e indignación de los padres debe ser muy grande.
Hoy por hoy, las instrucciones siguen siendo devolver el bote. No hay un mensaje claro a los afectados, tanto para los que hayan tenido a su hijo enfermo sin diagnóstico de salmonelosis como para los que si lo tienen seguro. Incluso en nuestro blog una lectora nos contaba que su hijo había estado muy enfermo y había consumido precisamente leche de este lote.
La información es escasa. No sabemos exactamente los protocolos que se han aplicado ni los que se aplican ahora. Una familia afectada debe sentirse muy perdida. Pero mi impresión refuerza mi idea de que los controles son insuficientes.
He encontrado un grupo del facebook con la denominación "Afectados por Salmonella" pero todavía tiene poco movimiento, sin embargo, supongo que puede servir como inicio para el contacto entre los afectados.
¿Y que hacemos si nuestro hijo ha tenido gastroenteritis o salmonella y había consumido este producto?
¿Qué se puede aconsejar en estos casos? Las autoridades no nos ofrecen un mensaje claro ni instrucciones para que todos los casos sospechosos sean tratados y analizados, ni tan siquiera queda claro que el brote tenga este orígen demostrable. Y parece que ya hay 71 casos confirmados.
Yo diría que, con los resultados de los análisis y con los botes de leche o los comprobantes de compra, se acuda a la autoridad sanitaria local exigiendo todas las confirmaciones y documentación que demuestre lo que se va a hacer. No aceptaría promesas ni vaguedades, la verdad. Y aunque sea un solo lote el afectado, yo cambiaría de marca o me propondría relactar si fuera posible.
Lo que no tengo nada claro es lo de devolver, sin más, el bote a la farmacia. Es necesario conservarlo para que se analice o exigir garantías del proceso que se va a realizar si se entrega. Es la prueba de que el bebé enfermo la ha consumido y que se trata de ese bote en concreto que debe ser analizado, por lo que, entregarlo sin documentación acreditativa del proceso a realizar para investigar ese bote en concreto sería perder una prueba. Yo querría una total garantía.
Se puede uno poner además en contacto con el Ministerio de Sanidad, con el Centro Nacional de Epidemiología, con la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición y con la OCU.
Además, si sus respuestas no son satisfactorias, se puede contactar con un abogado para que se pueda investigar si el problema tiene esta causa y, si fuera así, reclamar a la empresa u organismos la responsabilidad de los daños causados.
La primera denuncia
Unos padres ya lo han denunciado. Víctor Sánchez y Adeline Alcántara han denunciado a Laboratorios Ordesa porque consideran que su hijo sufre este problema por haber consumido la leche retirada.
Su pequeño, que tiene solamente un mes y medio de vida y lleva tomando esta marca desde que nació, está ingresado en el Hospital de la Fé de Valencia desde esta mañana tras muchas visitas por problemas estomacales previas.
Creo que son todo un ejemplo, han tomado la iniciativa dados los mensajes contradictorios de las autoridades. Deseo profundamente que su hijo se ponga bien pronto y se recupere sin secuelas de este problema de salud. Y, por supuesto, si la causante es esta leche, se realicen todas las investigaciones posibles, se tomen medidas contra los responsables, sea la farmacia, los laboratorios o las autoridades, y sobre todo, que se tomen medidas reales para que esto no pueda suceder más.
Resulta complicado dar un manual de instrucciones a los afectados, dada la poca información que hay hasta ahora. Si vuestro hijo tiene salmonelosis o gastroenteritis y ha tomado la leche Blemil Plus 1 (lote 236 especialmente) espero que estas instrucciones generales os puedan servir de ayuda.
En Bebés y más | Brote de Salmonelosis probablemente causado por leche artificial, Retirado un lote de Blemil Plus Forte 1