Hay muchas formas de calmar nuestro sistema nervioso cuando estamos nerviosos o ansiosos, más allá de cambiar hábitos como introducir el ejercicio en nuestra rutina, la meditación o la terapia psicológica (que, ojo, son opciones estupendas). Pero también podemos lograrlo a través de nuestra alimentación y de lo que bebemos, y, en este sentido, los tés pueden ser una buena opción.
En este caso, hablamos de un té originario de China que, además de tener un efecto calmante, tiene propiedades antioxidantes y otros beneficios. ¿Quieres descubrir cuál es?
Origen de este té de múltiples propiedades
En efecto, se trata del cada vez más conocido té matcha, un té de color verde intenso y brillante. El matcha es un té verde en polvo, que se popularizó gracias a los monjes Zen de Japón, aunque es originario de China.
La palabra 'Matcha' proviene del chino, adoptado posteriormente en Japón, y significa té en polvo (polvo de matcha). Los monjes Zen bebían té de matcha para mantenerse alerta durante sus largas jornadas de meditación y aumentar sus niveles de concentración sin el nerviosismo de otras bebidas.
Características de este té
El té matcha se procesa a partir de hojas de té tencha, a diferencia del té sencha japonés. Cuando lo ingerimos, al consumirlo en polvo, ingerimos cuatro veces más de antioxidantes (gracias a las catequinas que contiene) y todas las vitaminas de sus brotes.
Sus hojas se llaman "Camelia Sinensis", y tienen un gran sabor. Estas se cultivan a la sombra, y por esta razón incrementan los niveles de clorofila y de antioxidantes. De aquí su color verde intenso. Las hojas se cosechan para después cocerse al vapor y dejarse secar, para posteriormente molerse en un molino de piedra, siendo el resultado un polvo muy fino de verde oscuro.
A diferencia de las infusiones, en este té japonés se ingiere la hoja completa, y a diferencia de otros tés, el té matcha aporta una mayor cantidad de fibra. Su sabor es intenso, fuerte, con notas dulces y ligeramente amargas, y con un regusto a nuez duradero. Así, no tiene el amargor característico de otros tés. A este sabor característico se le denomina "Umami" (que significa "sabor delicioso").
Cómo preparar esta bebida
¿Cómo elaborarlo? Se añade el polvo con una cucharita dosificadora alargada de bambú que en Japón se llama "Chashaku", en un un vaso o cuenco (se suele usar un colador). Después se le añade el agua caliente (a 65º).
Los japoneses usan un cepillo hecho de bambú para integrar muy bien el té matcha con el agua caliente, que se conoce como "Chasen". Se bate enérgicamente en forma de "W", hasta que se forme espuma.
Todo esto se prepara en un cuenco de cerámica de nombre "Chawan", y todos estos utensilios se usan en el famoso ritual japonés Chanoyu, ceremonia milenaria respetada por parte del anfitrión a sus invitados.
Este té puede tomarse tanto frío como caliente. Además, se puede añadir a batidos, zumos o preparaciones de pastelería, bizcochos, helados y preparados en infusiones calientes o frías.
Beneficios para la salud y por qué puede relajarnos
En comparación con otros tés, el té matcha tiene más beneficios por la forma en que está hecho. Concretamente, tiene más antioxidantes que la infusión del té verde y que otros tipos de té. Se calcula que 1 gramo de té Matcha contiene 137 veces más antioxidantes que 1 gramo de té verde convencional, 53 veces más que las espinacas, 14 veces más que los arándanos y 5 veces más que las bayas de Goyi.
Por otro lado, como la mayoría de tés, contiene teína, una forma de cafeína que contiene L-teanina, un aminoácido que nos ayuda a mantenernos relajados. Se calcula que una ración de matcha (1 gramo) tiene aproximadamente la misma que un café espresso.
Eso sí, se recomienda no tomar más de 5 g/día y no consumirlo en la segunda mitad del día, porque recordemos que la teína es cafeína. Este efecto estimulante es gracias a su alto contenido de teofilina, una sustancia que estimula el sistema nervioso, el corazón, la secreción gástrica y el flujo renal. Pero al contrario de lo que ocurre con el café, personas que no toleran la cafeína son capaces de tolerar la teína.
Entonces, te preguntarás, si tiene cafeína, ¿cómo es que relaja? Porque, no es tanto que nos induzca un estado de relajación profunda, ni mucho menos, sino que nos puede tranquilizar. La psiconutricionista Itziar Digón así lo explica en Vogue:
"La cafeína del té matcha se asimila muy lentamente, es decir, cuando lo bebemos no aumenta sus niveles en sangre de forma brusca como ocurre con el café y, por tanto, no produce nerviosismo".
Además, el té matcha regula los niveles de colesterol y la insulina, estimula las defensas y potencia el metabolismo, sobre todo de grasas, ayudando al control de peso. Se suele decir que el té matcha, o lo odias o lo adoras. ¿Te animas a probarlo?
Foto | Portada (Película Downton Abbey, 2019)