Ser madre soltera: las reflexiones de tres madres sobre cómo son vistas las familias monoparentales en la sociedad
Ayer os compartimos el testimonio de tres maravillosas mujeres que, por diversas circunstancias de la vida, y cada una con sus particulares motivos, afrontan la maternidad en solitario.
Hoy continuamos con la segunda parte de la entrevista, en la que Montse, Rosa y Elena nos cuentan cómo entienden sus hijos y su entorno el modelo de familia que tienen, y qué dificultades son las que han tenido que afrontar en este tiempo.
Recordemos que Montse, es madre de un niño llamado Lucas de casi 4 años; Elena, tuvo a su pequeño Alejandro hace diez meses mediante inseminación artificial con semen de donante, y Rosa es madre de dos niñas, Alba de 15 años y Luna de 10 años, a las que tuvo por inseminación artificial con semen de donante y adopción, respectivamente.
Crecer sin la figura paterna
Alejandro, el hijo de Elena, es muy pequeño todavía para entender el modelo de familia monoparental en el que vive. Por el contrario, Rosa y Montse coinciden en afirmar que sus hijos sí son plenamente conscientes, y que el hecho de crecer sin la figura paterna es algo normal y natural para ellos.
"Mi hijo sabe que no tiene papá, pero jamás me ha preguntado por ello. A pesar de su corta edad, él entiende que existen diversos modelos de familia, e incluso cuando juega con sus muñecos así lo expresa, pues algunos tienen dos papás, otros sólo una mamá, otros un papá y una mamá... Es algo que tiene asumido y entiende con absoluta naturalidad" - cuenta Montse.
"Pero reconozco que mi mayor miedo es enfrentarme al día en que Lucas me pregunte quién es su padre o donde está, porque poco podré decirle salvo que nos abandonó estando yo embarazada. Aún así, guardo alguna fotografía de los primeros momentos del embarazo en los que parecía que todo iba a salir bien y nos íbamos a convertir en una familia, para que vea cómo es físicamente su padre"
Rosa me cuenta que a pesar de no existir una figura paterna en la vida de sus hijas, Alba y Luna, hay otras muchas figuras masculinas en su entorno que suplen ese papel:
"Ellas han crecido con esta verdad y la han normalizado, sabiendo que la calidad familiar y educacional no depende del numero de progenitores, sino de cómo son los progenitores o cómo se sienten. Nunca han manifestado inquietud alguna porque, además, hay muchas figuras masculinas en su entorno: su abuelo, su tio abuelo, mis hermanos, mis amigos..."
Ser madre soltera en la sociedad
Montse me explica que salvo la familia y los amigos, toda la gente de su entorno desconoce su historia y cree que es madre divorciada.
"Nadie se atreve a preguntarme directamente por el padre de Lucas, aunque si lo hacen no tengo ningún problema en contar lo que ocurrió. Si, por el contrario, me preguntan de un modo indirecto, la verdad es que no entro a dar detalles" - confiesa
Cuando le pregunto si Lucas se ha tenido que enfrentar alguna vez en el cole a alguna situación desagradable, me explica que la gran mayoría de los niños de tres ó cuatro años no entiende que él no tenga padre, y a pesar de que su hijo lo expresa de un modo muy directo, algunos compañeros de clase se empeñan en decir que "eso es imposible".
"Un día llegó a casa diciendo que un amiguito del cole le había dicho que todos teníamos un padre, y que él también tenía que tenerlo. A mi hijo, las palabras de su compañero no le hicieron dudar sino más bien lo contrario: no comprendía como aquel niño no podía entender que él no tuviera papá"
Pero sin duda, el peor momento vivido por Montse hasta la fecha tuvo lugar en la ludoteca a la que asistía su hijo antes de entrar al colegio, y fue protagonizado por adultos que, se supone, deberían motrar un mayor respeto y empatía hacia cualquier modelo de familia.
Montse me cuenta, con un cierto tono de tristeza aún en su voz al recordarlo, que los niños iban a preparar una manualidad para el Día del Padre cuando una de las monitoras le expresó sus dudas sobre cómo proceder con Lucas:
"Me dijo en un tono muy desagradable que no sabía que hacer con Lucas, porque como él no tenía padre no podía hacer la misma manualidad que el resto de sus compañeros. Le dije que eso no debía ser un problema, y que yo quería que mi hijo hiciera exactamente lo mismo que el resto de amiguitos de clase, a lo que ella seguía insistiendo en que eso era imposible porque mi hijo no tenía papá"
"A pesar de pedirle a la monitora, encarecidamente, que no cambiara la manualidad de Lucas, mi hijo acabó haciendo un detalle para el Día del Padre en el que se leía "Feliz Día, Abuelo". Recuerdo que aquel día lloré durante horas porque por primera vez sentí una enorme falta de respeto hacia mi situación personal, y una absoluta falta de empatía hacia mi hijo y hacia mí".
Elena explica en su blog cómo en algún momento de su embarazo tuvo que escuchar comentarios o preguntas un tanto desafortunadas, aunque por suerte, y según explica, lo normal es que la gente le dedique palabras de ánimo.
"Lo más light que me han dicho es que mi hijo no iba a criarse en una buena familia. Hubo quien me dijo también: "¡con lo guapa y lista que tu eres! ¿Cómo que no has encontrado una pareja para ser madre?". La gente a veces es de lo más impertinente pero por suerte, la mayoría de los comentarios, mensajes y palabras que recibo son de ánimo, fuerza y valentía"
Rosa, en cambio, me cuenta que ha tenido mucha suerte y que jamás se ha encontrado con un comentario desafortunado o ha vivido una experiencia desagradable relacionada con el hecho de ser madre soltera.
"Al principio, cuando mi hija Alba nació, lo que más me llamaba la atención era que la gente me dijera que era muy valiente. Yo me preguntaba, ¿valiente, por qué? ¿Por tener un hijo? Entonces la inmensa mayoría de las mujeres que tuvieran un hijo serían igual de valientes que yo..." - recuerda Rosa
"Con el tiempo lo entendí. Llevaban razón. Fuí valiente y soy valiente. Pero lo soy porque he sido capaz de tener un deseo, de tener un sueño y luchar por él, luchar por conseguirlo, sin tener en cuenta lo que opinen los demás, porque como dice la canción, lo que opinen los demás está demás" - sentencia.
Ayudar a otras madres solteras
Tanto Elena como Rosa están volcadas en ayudar a otras mujeres que, como ellas, buscan convertirse en madres en solitario.
Elena decidió crear un blog llamado Madre Soltera, en el que no sólo comparte sus vivencias y reflexiones como mamá, sino que ofrece consejo basado en su experiencia, sobre tratamientos de fertilidad, conservación de óvulos o cualquier otra duda que pueda surgirle a la mujer en su camino hacia la maternidad en solitario.
"Conozco a muchas mujeres que se pasan años en procesos de fertilidad y que se gastan todos sus ahorros en poder ser madres. Mi intención es dar a conocer que pueden hacerlo a través de la Seguridad Social en muchas comunidades autónomas. Por suerte, el actual Gobierno nos permite hacerlo y poder hacerlo con menos recursos económicos, aunque es cierto que a través de las clínicas privadas de fertilidad, el proceso es mucho más rápido" - explica Elena.
Rosa también ha querido ayudar a otras personas compatiendo su experiencia a través de la web Masola. En ella, podemos encontrar información sobre técnicas de reproducción asistida, diferentes modelos de familia o testimonios de otras madres.
"Mi web supuso una satisfacción personal muy grande. Comencé con ella para conectar con otras madres con mi misma casuística, y como una forma de mantener mi mente ocupada mientras adoptaba a Luna. Y comenzó a darme grande satisfacciones emocionales. Chicas que gracias a la web o a los talleres y charlas han sido madres" - explica Rosa.
Pero además de la web, esta mamá ha escrito tres cuentos infantiles para explicar a los niños, su origen.
"Cloe quiere ser mamá" y "Lucía y el cofre mágico de la familia" son dos cuentos dirigidos a los hijos de madres solteras mediante técnicas de reproducción asistida con semen de donante
"Nora y Zoe, dos mamás para un bebé", está dirigido a niños con dos mamás.
Por su parte, Montse quiere lanzar un consejo a todas aquellas mujeres que, de pronto, se encuentren en la misma situación en la que se encontró ella: abandonada por su pareja, y con el reto de criar a un bebé en solitario.
"A todas esas grandes mujeres les diría que no olviden que son fuertes, guapas, inteligentes y muy capaces de criar a sus hijos en solitario. Si algún día quieren podrán encontrar de nuevo el amor, aunque es importante que sepan que no necesitan de nadie para criar a sus hijos"
Una reflexión similar hace Rosa en su web, cuando dice:
"No hay porqué renunciar al amor, ni a una misma. Tampoco pasa nada si no llega. Hemos ensalzado en exceso la vida en pareja, la vida con hijos, las relaciones sexuales y todo aquello que nos supeditaba emocionalmente al hombre en esa sociedad patriarcal y paternalista".
Agradecimientos | Montse, Rosa y Elena
En Bebés y Más | Familias monoparentales, Ser madre soltera: el testimonio de tres madres sobre el embarazo y la crianza de sus hijos en solitario, Reproducción asistida, Cada vez nacen más bebés de madres solteras